El calvario judicial de dos ‘tiktokers’ egipcias: nueve meses en prisión por “incitar al libertinaje”

Un juez ha vuelto a mater a Mawada Eladhm y Haneen Hossam en la cárcel justo cuando consiguieron anular su sentencia por delitos contra la moralidad. Ahora las acusan de tráfico de personas.

Dos conocidas tiktokers egipcias que acababan de ser absueltas de la acusación de contravenir “los principios y valores de la sociedad” fueron acusadas el viernes de tráfico de personas por la Fiscalía General de Egipto, que ordenó su vuelta a prisión de forma preventiva.

La Fiscalía General acusa ahora a Mawada Eladhm y Haneen Hossam de instigar a la inmoralidad a través de un grupo de WhatsApp, en el que recibían órdenes para explotar a otras chicas, según una fuente judicial.

También se las acusa, de acuerdo con dicha fuente, de huir de la justicia, intentar ocultar su identidad y cifrar sus teléfonos y cuentas en redes sociales.

El diario Mada Mars, que citó a los abogados de las dos jóvenes, indicó que estos nuevos cargos se basan en el hecho de que aparecen menores de edad en los vídeos que ambas crean para la red social china, TikTok.

Condenas de 2 años

Haneen Hossam y Mawada Eladham tienen cada una más de un millón de seguidores en TikTok, y han pasado nueve meses en la cárcel después de ser declaradas culpables de animar a las mujeres a compartir imágenes en la aplicación para compartir vídeos a cambio de dinero, atentando así “contra los valores y principios de la familia”.

A Hossam, de 20 años, se la acusó concretamente de “alentar a las mujeres jóvenes a conocer hombres a través de las redes sociales”; mientras que a Eladham, de 22, de publicar fotos y vídeos “indecentes”.

El martes 12 de enero, un tribunal anuló la condena de dos años de cárcel de las jóvenes, aunque todavía enfrentan una multa de 300.000 libras egipcias (19.218 dólares).

Hossam esperaba ser liberada esta semana, pero el jueves un juez dijo que permanecería en la cárcel en espera del juicio por cargos de trata de personas, dijo su abogado Hussein El Bakar a la Fundación Thomson Reuters.

“Apelaremos con la esperanza de que Haneen sea liberado pronto”, dijo El Bakar. Por su parte, el abogado de Eladham, Mahmoud Elsweify, no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.

Política anti-redes

Hossam, que cubre su cabeza con el velo islámico, es conocida por sus vídeos en los que canta y baila, y a veces da consejos a otros egipcios de su edad sobre diferentes asuntos, como sus estudios. Mientras, Eladhm muestra en las redes sociales su estilo personal, como su pelo de colores pastel, su coche o su hogar, además de comentar sobre cuestiones de actualidad.

Pero sus casos no son los únicos. En los últimos años, muchas otras jóvenes han sido detenidas en Egipto por un uso considerado inapropiado de las redes sociales. Generalmente, son acusadas de lucrarse con ello e “incitar al libertinaje” por desafiar los valores sociales conservadores del país.

Otro ejemplo, ocurrió en diciembre, cuando una modelo fue detenida por posar de forma “indecente” frente a una pirámide y subir la imagen a Instagram.

Los legisladores egipcios exigieron el año pasado que el gobierno prohibiera TikTok en el país, diciendo que promovía la desnudez y la inmoralidad.

Esta política gubernamental contra la libertad de expresión es muy criticada por organizaciones de derechos humanos. Entessar El-Saeed, director de la Fundación de El Cairo para el Desarrollo y el Derecho, dijo que muchos en Egipto están luchando por adaptarse a los cambios sociales que traen consigo las nuevas tecnologías.

“Es pura libertad de expresión publicar vídeos en las redes sociales, pero la sociedad aún no comprende los cambios que están creando un entorno y una mentalidad completamente diferentes”, declaró a Reuters.