El ingeniero Fabián Pons, director del Observatorio Vial Latinoamericano (OVILAM), se refirió en la 99.9 a las alarmantes cifras que registraron de muertes por la falta de uso del casco en motocicletas. “La gente cree que sólo se debe usar en vías de alta velocidad y no en las calles de la ciudad”, advirtió.
Los accidentes viales siempre son una preocupación, pero la situación de mortandad que presentan aquellos que circulan en moto y, principalmente, los que no usan casco sigue en aumento. El Ingeniero Fabián Pons, director del Observatorio Vial Latinoamericano (OVILAM), se refirió al tema en la 99.9 después de haber hecho un relevamiento en la zona metropolitana.
“La gente está tomando de forma errónea el uso de casco, al igual que lo hacen los automovilistas con el cinturón de seguridad. Creen que sólo se debe usar en vías de alta velocidad y no en las calles de la ciudad”, advirtió en principio. Luego abundó con cifras: “en el caso de los acompañantes, en el Gran Buenos Aires, sólo 1 de cada 4 acompañantes usan cascos. Por eso tenemos el nivel de mortalidad que tenemos, de por sí la moto es un vehículo riesgoso y sin proteger la cabeza, aumenta ese riesgo”.
Las irregularidades son muchas y algunas de ellas tienen que ver con la chapa patente: “muchas de las motos secuestradas no las van a buscar, en su mayoría porque no tienen patente. Un 9% de las motos que transitan en la zona metropolitana no tienen patente. En la moto esto no levanta sospecha”, indicó respecto de las autoridades que deberían actuar en el control de los vehículos.
Un caso similar ha sucedido con los cuatriciclos esta temporada y sobre este tema, Pons indicó que “el principal responsable son los adultos que les dan esos vehículos o los llevan. Después están los estados que permiten estas cosas con la excusa de no espantar el turismo”.
Entre la falla de los controles y la falta de responsabilidad se crea un cóctel mortal: “es una cuestión de educación y concientización. Notamos que es siempre de corto plazo, nunca de largo plazo. Piensan que con una moto o un cuatri se pueden romper una pierna o romper la cabeza, pero no se asumen las consecuencias de eso como las repercusiones sociales, lo que genera en la familias las secuelas que pueden quedar”.
Una de las medidas que el Ingeniero vio con buenos ojos es la intervención de la Agencia Nacional de Seguridad Vial en el control de las rutas nacional con el poder de policía: “no está mal. Hay una inoperancia total por parte de otras autoridades, por lo menos deberían dejar que controlen las rutas nacionales. El principal responsable de que no se usen cascos son los municipios. El gobierno nacional debe invitar a la provincia y la provincia invita a los municipios a controlar e informar. No le carguemos las tintas al estado nacional y empecemos a ver lo que pasa en los municipios y las provincias”.
Por último y como conclusión de la situación, Fabián Pons señaló que “el control es importantísimo, pero el problema socio cultural de la prevención es aún mas importante”.