Ropa, tecnología y juguetes cuestan hasta 65% menos al cruzar la Cordillera. Los argentinos van cada vez más y ya dejan más de $ 27.700 por minuto.
La oferta es difícil de resistir: conseguir ropa, calzado, tecnología, juguetes y mucho más a precios hasta 65% menores, a sólo dos horas de avión desde Buenos Aires o a algunas más por tierra desde provincias vecinas. Tentados por semejante propuesta, los viajes de argentinos a Chile vienen marcando récord tras récord. Y también el dinero que, en vez de usarse en negocios nacionales, se vuelca al otro lado de la Cordillera en cantidades cada vez más impactantes. Por el auge de las escapadas de “shopping”, el gasto de los argentinos en Chile creció un 100% en dos años y ya suma casi el triple de lo que era en 2010.
Acaban de revelarlo estadísticas oficiales del país vecino, según las cuales el año pasado los visitantes argentinos dejaron en Chile el inédito monto de 896 millones de dólares. En 2015 habían sido US$ 627 millones, US$ 447 millones en 2014 y sólo US$ 313 millones en 2010.
El número significa que los argentinos ya gastan en Chile por año el equivalente a 7 meses enteros de facturación de todos los shoppings de la Ciudad de Buenos Aires, calculó Clarín tomando datos del Indec. A su vez, esos casi US$ 900 millones anuales implican una fuga promedio de US$ 1.705 por minuto, o $ 27.700 cada 60 segundos al cambio actual.
Se trata de un auge que sigue creciendo a un ritmo acelerado. Las últimas estadísticas de la Policía de Investigaciones chilena indican que en el primer cuatrimestre de 2017 las llegadas de argentinos se dispararon otro 30,6% frente al mismo período del 2016, el año récord.
Además, entre enero y marzo las compras con tarjetas bancarias argentinas del otro lado de los Andes crecieron otro 41,5% interanual, según la Cámara de Comercio de Chile. Y por estos días Santiago volvió a quedar a la cabeza de las reservas para las vacaciones de invierno en las principales agencias de turismo
“A la fecha, según las ventas realizadas, Santiago de Chile es el primer destino internacional para volar entre el 10 y el 28 de julio, que es cuando habrá receso escolar en la mayoría de las provincias argentinas”, comentaron en Despegar.
En Almundo la capital chilena también volvió a ser por segundo año seguido el destino más elegido para el receso invernal, por encima de ciudades como Miami, Nueva York, Madrid y Río de Janeiro, y de nacionales como Bariloche y Cataratas, entre otras. “Santiago sigue imponiéndose, impulsado por el boom de las compras, por los precios competitivos para disfrutar de la nieve y por la incorporación de aerolíneas low cost que operan rutas directas entre la Argentina y Chile”, explicaron.
“La demanda de este destino viene sostenida desde comienzos de año. Santiago suele elegirse como destino de compras y ahora en vacaciones se están sumando las familias por la posibilidad de esquiar en nuevos centros invernales”, agregaron en la agencia Atrápalo, que también tiene a la “nueva Miami latinoamericana” en lo más alto de su ranking para el receso invernal.
En Despegar detallaron que para julio los vuelos desde Buenos Aires ida y vuelta a Santiago arrancan en $3.923 y que las habitaciones dobles en hoteles 3 estrellas con desayuno tienen tarifas desde $ 463 la noche. Montos que los turistas ven como una inversión fácil de recuperar con los ahorros obtenidos en las compras.
Por el boom de las “escapadas” de shopping, la estadía de los argentinos en Chile se acortó: ahora se quedan un promedio de 5,4 noches, frente a las 6,5 registradas en 2013 y las 7,9 de 2006 y 2007. En paralelo, el gasto por día de cada visitante creció un 19,1% en dólares desde 2010, al saltar de US$ 46,60 a los US$ 55,50 actuales, según datos de la Subsecretaría de Turismo del país vecino.
En ese organismo estimaron que el 2017 cerrará con unas 3,7 millones de visitas de argentinos a Chile, unos 800.000 más que el año pasado.