El secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Carne del Gran Buenos Aires (Sicba), Silvio Etchehun, explicó como se llegó al conflicto en la empresa Cresta Roja que ha generado que 5.000 trabajadores se queden sin trabajo. “La compañía empieza con un problema luego que se terminan los subsidios en 2012”, indicó sobre el origen del problema.
La empresa Cresta Roja está en medio de una disputa política entre Nación y Provincia donde unos anuncian haber solucionado el problema y otros indican que persiste. Esta mañana, en la 99.9, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Carne del Gran Buenos Aires (Sicgba), Silvio Etchehun, brindó un panorama completo de la situación: “la compañía tiene tres plantas y un molino de cereales. Son 5.000 trabajadores y 5 sindicatos de las distintas actividades. Es una compañía donde se recoje cereal, se procesa, se prepara alimento balanceado, se cria pollo y se transporta pollo”, aclaró.
El origen de los inconvenientes se remontan a los últimos tres años hasta el punto de llegar a un límite: “la compañía empieza con un problema luego que se terminan los subsidios en 2012. El estado no le paga las compensaciones que se habían arreglado con Guillermo Moreno, eso le generó un pasivo de 300 millones de pesos y empezó a tener un arrastre negativo que no le permitió operar dentro del mercado financiero habitual”. La debacle era inevitable porque no había dinero ni producción que alcanzara: “empezaron a tener problemas en el pago de salarios y a consumir todo el stock que tenía de resguardo. Llegó un momento que se quedó sin giro financiero, sin pollo, sin cereales y no le pudo pagar más a los trabajadores por lo que decidieron cerrar la fábrica”.
Entonces fue cuando se decidió hacer una reunión entre todas las partes, incluido el Ministro de Trabajo de la Provincia de Buenos Aires, Oscar Cuartango, para solucionar el conflicto: “estuvimos reunidos por Cuartango y la empresa trajo un cronograma y una propuesta de reincorporar a los 5.000 trabajadores. Fue aceptada y firmada y cuando fuimos a trabajar al otro día, uno de los sindicatos que había firmado a la noche se arrepintió y ahora se generó una situación donde los compañeros de la alimentación están sin reincorporarse, cortando la ruta y con la planta parada. Volvió todo a punto cero”, especificó Etchehun.
Esta quita de subsidios, literalmente le complicó la vida a Cresta Roja y es algo a lo cuál se había comprometido Guillermo Moreno durante su participación como funcionario nacional. Ahora nadie se hace cargo: “es una compañía que tiene 50 años y siempre se sostuvo sin subsidios. En 2009, Moreno con Domenech, el presidente de la Cámara, toman 10 plantas frigoríficas para controlar el precio máximo en los mercados. Todo era en base a compensaciones”.
Lo que reclamó el sindicalista es que ahora, como en aquél momento se hicieron presentes para cerrar ese acuerdo, el gobierno asista a la empresa: “ahora tienen que comprometerse para ayudarlos a salir de esta situación. Más allá de que los gremios acompañemos, si no hay cereales, no hay huevos y no hay pollos, es imposible que una compañía de 5.000 trabajadores vuelva a funcionar”, anticipó.