Una imagen satelital del iceberg A-68A mientras flota hacia la isla Georgia del Sur en el Atlántico Sur, el 8 de diciembre de 2020.
Un enorme iceberg, veinte veces más grande que la Ciudad de Buenos Aires, avanza peligrosamente hacia la isla Georgia del Sur en el Atlántico, donde los científicos pronostican que podría causar un desastre ecológico en ese archipiélago poblado de pingüinos, focas y albatros, sin población humana permanente.
Los científicos vienen analizando desde hace semanas el rumbo del iceberg, aproximadamente del mismo tamaño que la isla misma, que viene serpenteando el archipiélago y acercándosele peligrosamente desde hace más dos años, luego de haberse separado de la península Antártica en julio de 2017. Actualmente se encuentra a apenas 50 kilómetros.
La península de Larsen es uno de los lugares de más rápido calentamiento en la Tierra, registrando una temperatura récord de 20,75°C el 9 de febrero. El calentamiento tiene a los científicos preocupados por el derretimiento del hielo que conduce al aumento del nivel del mar en todo el mundo.
El gigantesco iceberg, apodado A68a, está en camino de chocar con la isla Georgia del Sur, un remoto territorio bajo ocupación británica, reclamado por la Argentina, 1550 kilómetros al este de las Islas Malvinas.
Sin embargo, no está claro si la colisión ocurrirá en días o en semanas, ya que el iceberg se acelera y desacelera según el flujo de las corrientes oceánicas que encuentra en el camino, dijo Geraint Tarling, un oceanógrafo biológico del British Antarctic Survey, que ha estado rastreando la masa de hielo.
Incluso la cuestión de la colisión es aún incierta, ya que las corrientes podrían llevar el iceberg más allá de la isla, dijo Tarling.
“Las corrientes alrededor de la isla son complejas y aún es posible que la colisión no ocurra”, agregó.
Imágenes capturadas por un avión de la Royal Air Force británica publicadas el martes muestran la magnitud del monstruoso iceberg de 4200 km2, cuya superficie tiene túneles, grietas y fisuras. Se pueden ver trozos de hielo flotando cerca.
“El tamaño del iceberg A68a significa que es imposible capturarlo enteramente en una sola toma”, dijeron funcionarios británicos en un comunicado.
Los científicos temen que el iceberg, al golpear la isla, pueda aplastar la vida en el lecho marino. Si quedara trabado en el flanco de la isla, podría bloquear a los pingüinos y aislarlos de sus rutas normales para alimentar a sus crías.
Las islas Georgias del Sur no solo son el mayor refugio de pingüinos rey del planeta, sino también una de las mayores reservas ecológicas del mundo y hábitat para millones de animales antárticos.
El A68a también podría ser un obstáculo para que los barcos del gobierno británico realicen sus patrullas de pesca y vigilancia alrededor de Georgia del Sur y las islas Sandwich del Sur, dijeron funcionarios británicos.