La inversión térmica y el terral, un viento muy caliente, impiden trabajar a los aviones. Tres bomberos han resultado heridos. La mayoría de los evacuados residen en Benahavís.
El fuego no da tregua en Sierra Bermeja. Las llamas han carbonizado en menos de 24 horas unas 2.150 hectáreas del término municipal de Pujerra (298 habitantes, Málaga) y las dificultades para atajar las llamas es máxima. Aunque cerca de 500 personas han trabajado durante toda la noche sobre el terreno para intentar extinguir el incendio, esta mañana los esperados medios aéreos han tenido que permanecer en tierra más de lo previsto debido a las condiciones climatológicas. El aire caliente no ascendía debido a una inversión térmica y el humo se quedaba estancado, impidiendo el vuelo de las aeronaves, que no han podido trabajar hasta las 13.00 horas. Alrededor de 3.000 personas han permanecido desalojadas de sus viviendas en el casco urbano de Benahavís (7.829 habitantes) y de diferentes urbanizaciones de la zona, si bien la dirección del Plan Infoca contra incendios ha autorizado su vuelta ordenada y paulatina a primera hora de la noche de este jueves. Fuentes de la Guardia Civil han asegurado que todavía no han podido empezar a trabajar para investigar las causas del incendio, que se desconocen. Tres bomberos resultaron heridos este miércoles, aunque solo uno permanece en el hospital con pronóstico reservado y quemaduras en sus piernas.
Con caras que reflejaban el cansancio, pasadas las doce del mediodía un retén del Servicio de Extinción de Incendios Forestales de Andalucía (Infoca) aterrizó en helicóptero en las inmediaciones del puesto avanzado, instalado en un área recreativa junto a la ermita de la Virgen del Rosario, en Benahavís. No tienen permitido hablar con la prensa, pero sus rostros lo decían todo. “Vamos regular, peor que ayer”, decía uno de ellos mientras se quitaba el casco. Eran una veintena de bomberos que acumulaba 20 horas de lucha contra el fuego, fueron los primeros en llegar a primera línea a las cuatro de la tarde del miércoles. Un arsenal de botellas de agua, refrescos y bocatas les recibía y todos iban a comer a la sombra antes de ser trasladados al hotel. Este jueves hay ya alrededor de un millar de personas trabajando en la extinción del fuego entre personal del Infoca, bomberos del consorcio provincial de Málaga y efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME), Guardia Civil, Protección Civil, Emergencias 112 y diferentes cuerpos de policía local de los municipios. A las 18.20 eran 23 los grupos aéreos que trabajaban en el fuego, a los que se suman 13 grupos de bomberos forestales dotados con ocho autobombas.
Tras un miércoles de fuerte viento de terral que hacía avanzar al fuego a unos 30 metros por minuto, el jueves amaneció con una leve brisa que traía dos consecuencias. La buena es que los equipos de tierra podían trabajar en asegurar el perímetro. La mala es que el humo quedaba estancado sobre Sierra Bermeja y tanto helicópteros como hidroaviones no podían trabajar. Las condiciones cambiaron cerca de la una de la tarde y las aeronaves comenzaron a verter agua sobre el bosque de pinos que está ardiendo. “Estamos siempre pendientes de las previsiones, tanto de cómo cambia el viento, de la humedad… Por eso siempre tenemos dos o tres planes distintos para actuar”, decía esta mañana Juan Sánchez, coordinador del operativo de extinción del Infoca.
La decisión de este organismo ha sido optar por la estrategia del fuego técnico, que consiste en propagar llamas de forma controlada para que se encuentren con el incendio original, lo que permite asegurar los perímetros y controlar la extensión que se carboniza. Supone renunciar a salvar una parte, pero se evita el riesgo de que se queme toda la sierra. El presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno, ha subrayado esta mañana que la inversión térmica ha impedido el vuelo de los aviones. “Hemos perdido cuatro horas que son las más importantes del día. Desde que sale el sol, cuando la temperatura es más baja y donde pueden actuar con mucha eficacia los medios aéreos. Aun así, tengo que decir que está toda la carne en el asador”, ha dicho en un acto en el Puerto de Fuengirola, desde se podía ver la columna de humo, como desde el resto de municipios de la Costa del Sol.
El avance y persistencia de las llamas mantiene fuera de sus casas a unas 3.000 personas, la mayoría residentes en las urbanizaciones de lujo Montemayor, Benahavís Hill y Marbella Club (las mansiones de Marbella se extienden por su vecina Benahavís), y también se han desalojado seis viviendas de un núcleo de casas diseminadas de la zona de Velerín alto, en Estepona, según ha informado Emergencias 112. La carretera A-7175 permanece cortada en sentido ascendente de la vía por el humo y para facilitar el trabajo de los servicios que actúan en el lugar.
Además, tres bomberos han resultado heridos en las labores de extinción, uno de ellos con quemaduras en el 25% de su cuerpo, según explicó el presidente de la Junta de Andalucía, que se desplazó hasta la comarca malagueña tras un mitin electoral en Torremolinos. Es la misma zona ya se vio afectada en septiembre de 2021 por el que fue el incendio más virulento del año pasado en España, que arrasó casi 10.000 hectáreas de ocho municipios.
El responsable del Consorcio Provincial de Bomberos de Málaga (CPB), Manuel Marmolejo, ha explicado este jueves que durante toda la noche han continuado trabajando los efectivos para luchar contra el incendio forestal declarado en Pujerra e “intentar perimetrarlo”. Al respecto, ha incidido en que hay dos focos en los que se trabaja y también actúan los medios aéreos, ya que “por lo escarpado del terreno y la zona de muy difícil accesibilidad es la única forma posible de poder controlar este incendio”.
Marmolejo ha señalado en Canal Sur Radio que el fuego, declarado en el paraje de La Resinera, se extendió rápidamente y ha añadido que “las condiciones meteorológicas no acompañaron para nada”, aludiendo al “viento de terral muy fuerte, 37 grados y nada de humedad”. Por otro lado, Marmolejo ha señalado que para la jornada de este jueves se espera que el viento sea de levante, lo que “va a favorecer” y “ayudar” a la extinción del fuego. Además, los medios aéreos van a poder trabajar durante toda la jornada.
El consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, ha señalado que el actual incendio no es tan grave como el del verano pasado. “No es el incendio de Sierra Bermeja (…), fue mucho más complejo. Esperemos que sea más fácil —y en menos tiempo— de controlar”.
El escenario del incendio lo ha sido también de la campaña electoral andaluza. Juan Espadas, candidato del PSOE, ha suspendido varios actos de su agenda para desplazarse a la zona, donde ha lamentado la “falta de previsión y del trabajo bien hecho” por parte de la Junta “en una materia que es muy frágil” y está “sujeta a condiciones meteorológicas, y también desgraciadamente a veces a la conducta humana, que es la que genera incendios tan complejos como el que el año pasado vivimos en Sierra Bermeja”. La candidata de Vox, Macarena Olona, ha acudido a las proximidades del incendio para destacar la “unidad” de las administraciones “a pesar de los distintos signos políticos”. Además de Moreno, presidente de la Junta y candidato del PP, también se ha desplazado a Málaga Juan Marín, vicepresidente, cabeza de cartel por Ciudadanos.
Las candidatas de las coaliciones de izquierdas, Inmaculada Nieto (Por Andalucía) y Teresa Rodríguez (Adelante Andalucía), no han asistido. En un tuit, Nieto ha señalado que “la presencia [en el incendio] de candidatos y candidatas en campaña electoral es un estorbo. Ayer [por este miércoles] hablé por teléfono con Moreno para que me informase de la situación y seguiré al tanto sin imposturas ni escenificaciones”. Rodríguez ha mostrado su “gran preocupación” por el fuego. “Nuestro corazón está con los tres bomberos heridos, con el máximo deseo de que se recuperen lo antes posible, y que cuanto antes se contenga y extinga el fuego”, ha señalado Rodríguez, que ha apreciado una “absoluta negligencia” por parte del PP, a quien acusa de haber practicado “el negacionismo climático en la desprotección de la superficie forestal”.
Un total de 500 bomberos forestales y otros profesionales del Infoca y de los servicios provinciales trabajan sobre el terreno, así como diez agrupaciones del Voluntariado de Protección Civil (Torremolinos, Marbella, Mijas, Benalmádena, Estepona, Fuengirola, Ronda, Antequera, Alhaurín el Grande y Cártama) con 58 voluntarios van a trabajar a lo largo del día en el operativo. Durante la madrugada se ha completado el despliegue de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que ha puesto a disposición del operativo a 233 efectivos, 23 vehículos ligeros y 58 pesados.
La del miércoles era una de las primeras jornadas de terral —viento seco y caliente que llega desde la zona norte de la provincia malagueña, y que se calienta con roce con el terreno seco— y las peores previsiones sobre sus consecuencias se confirmaban poco después de las tres de la tarde. Era el momento en el que se daba aviso de la existencia de un incendio forestal en el paraje La Resinera, una finca que fue propiedad de Muamar el Gadafi, que se utiliza como coto privado de caza y tiene más de 6.500 hectáreas protegidas por su valor ambiental y repartidas entre los términos municipales de Benahavís, Júzcar y Pujerra. El fuego comenzó en suelo de este último pueblo.