Esta mañana en la 99.9, el periodista Walter Goobar habló sobre las revelaciones del fiscal Alberto Nisman, quien denunció que Irán tiene una red terrorista montada en América Latina. “Hay una metodología de los grupos de inteligencia iraníes en distintos lugares del mundo”, remarcó.
Sin dudas, las revelaciones causaron estupor en el país y en gran parte del mundo. El fiscal Alberto Nisman acusó a Irán de fomentar actos terroristas en América Latina y de tener una red montada en distintas zonas del Cono Sur.
Para quien fuera el encargado de investigar cómo el país islamita se infiltró en Argentina para perpetrar el atentado a la AMIA, este tipo de cosas ya son conocidas; incluso, algunos especialistas no se vieron sorprendidos por las declaraciones de Nisman. El periodista Walter Goobar habló esta mañana en la 99.9 y destacó que “el informe de Nisman es contundente. Lo que impacta es que se produzca después del accidentado intento de la Cancillería de establecer una Comisión de la Verdad junto con Irán”.
También remarcó que en la política iráni hay un trasfondo que hoy involucra a personas con pedido internacional de captura: “Irán se encamina a unas elecciones donde varios de los candidatos forman parte de la causa, son sospechosos. Algunos, incluso, están con orden de captura de Interpol. Hay cosas del informe que a mí no me sorprendieron, porque sostengo esto desde el año 1996, cuando escribí ‘El tercer atentado’”.
El periodista también señaló que esta red denunciada por Nisman existe en otros lugares del planeta y que, en todos los casos, se maneja de modo similar: “hay una metodología de los grupos de inteligencia iraníes en distintos lugares del mundo. Nisman abunda en algunos hechos posteriores, como el fallido atentado al aeropuerto JFK en Nueva York. Hay un modelo organizativo que se repite en distintos países y que, en general, trabaja con la idea de tener muchos blancos posibles y alternativos. Siempre evaluaron las consecuencias políticas, y atacan donde esas consecuencias posibles son menores”.
Después, explicó por qué en su momento Argentina fue elegida como blanco de un ataque: “la Justicia y los servicios de Seguridad e Inteligencia demostraron una fuerte incapacidad para resolver los atentados. En Francia y Alemania, inmediatamente las células locales fueron desactivadas”.
A pesar de su investigación, que fue fructífera y brindó datos de gran importancia, la declaración de Nisman hace que tenga un respaldo más para el juicio: “ahora, con este informe, se incorpora a la causa”, indicó Goobar. También destacó algunos factores que hasta ahora no han sido investigados: “está el hecho de que en la época previa al atentado vinieron muchos estudiantes iraníes a la Facultad de Medicina; también, muchos de ellos manejaban taxis, una metodología común de estas células. La Facultad de Buenos Aires nunca investigó porque muchos de estos estudiantes desaparecieron después del atentado. Pero no solo eso: el estacionamiento donde estuvo el coche bomba en los días previos al atentado, queda justo frente a la Facultad de Medicina”.
La investigación del atentado a la AMIA todavía tiene muchos puntos oscuros. Y quizás, con cierta intencionalidad, habla muy mal de cómo se lleva adelante una causa por parte de los actores jurídicos argentinos: “se ha tardado muchos años en llegar a elementos que estaban ahí”.