El magnate chino que quiere cambiar la industria de la construcción

En las afueras de Changsha, en el sur de China se levanta una nueva torre. Su tamaño es modesto para los estándares chinos.

rascacielosCon 204 metros, se levanta a menos de un tercio de la altura que ostenta la torre más grande de Shanghai.
Es un bloque de cristal y acero que probablemente no ganará premios de belleza arquitectónica, indica el corresponsal de la BBC, Finn Aberdein.
Pero lo que es sorprendente es la velocidad a la que fue construido. Un video muestra como se disparaba hacia al cielo a razón de tres plantas por día.
Para el hombre detrás del proyecto, Zhang Yue, esto es sólo el comienzo.
“Los seres humanos han experimentado revoluciones en la industria, la agricultura, el transporte y la información, pero aún no en los edificios”, dice el manual de la compañía que fundó, Broad Group.
“Aquí viene la revolución”.

Revolución modular

La revolución será modular, insiste Zhang. Mini Sky City (Mini Ciudad del Cielo) se ensambla a partir de miles de módulos de acero hechos en fábrica. Es un método que él dice no es sólo rápido, sino también seguro y barato.
Ahora quiere dejar un lado el “Mini” y utilizar la misma técnica para construir el rascacielos más alto del mundo, la Ciudad del Cielo (Sky City, por su nombre en inglés).
Mientras que el actual titular del récord, la torre Burj Khalifa de Dubai, con sus 828 metros de altura tomó cinco años para concluirse, Zhang dice que su propuesta “ciudad vertical” de 220 pisos se llevará tan sólo siete meses – cuatro para los cimientos, y tres para la torre en sí. Y será 10 metros más alta que el edificio de Dubai.

La torre

Desde que se puso el techo en Mini Sky City el 17 de febrero de 2015, la torre de Zhang Yue ha atraído mucha atención, señala Finn Aberdein, de la BBC.
Los periódicos de muchos países han enumerado sus llamativas estadísticas vitales: 19 atrios, oficinas para 4.000 personas y 800 apartamentos, y por supuesto los 19 días que se tardó en construir.
Esta última cifra requiere una ligera advertencia – la torre fue construida en dos enviones: los primeros 20 pisos fueron construidos en una semana en 2014, pero la burocracia detuvo la construcción durante un año, con las últimas 37 plantas terminadas en 12 días de trabajo en febrero.
Para algunos, la velocidad de la construcción se ha planteado una pregunta. ¿Puede algo construido tan rápido realmente seguro?
De hecho, Zhang dice que la seguridad es la misma razón por la que se metió en la construcción hace siete años.
Un fuerte terremoto sacudió entonces a la provincia de Sichuan, matando a 90.000 y dejando a casi cinco millones de personas sin hogar.
“En ese momento, todo el mundo estaba debatiendo cómo hacer edificios más seguros”, dice Zhang.
Viajó a Alemania, Japón y EE.UU. para reunirse con ingenieros expertos, y todos ellos le hablaron del acero.
Las estructuras de acero eran más fuertes, pero también lo suficientemente flexibles como para doblarse, en vez de quebrarse, durante un temblor.
El problema era el costo – el acero era prohibitivamente caro para edificios normales.
Así que la idea de Zhang Yue fue hacer una nueva forma, más barata, de la estructura de acero, reporta nuestro corresponsal.

Desde un hangar

En 2010 hicieron su primer prototipo público – un edificio de seis plantas construido en un solo día para la Expo de Shanghai.
Desde entonces se han completado más de 30 edificios, entre ellos un hotel de 15 plantas en seis días, un hotel de 30 pisos en 15 días, y la reciente Mini Sky City.
El proceso es siempre el mismo. El acero se lleva a una de las seis grandes fábricas-hangar del grupo Broad, donde se convierte en uno de los pocos módulos básicos – una sección de la columna, una viga o el piso.
Estos se cargan en camiones y son conducidos al sitio, donde son armados y finalmente, atornillados y soldados entre sí.

El sueño

Zhang fundó el Broad Group con su hermano en 1988 y rápidamente se convirtió en una de las empresas privadas más rentables de China.
Tiene una fortuna estimada en US$900 millones, según reporta Finn Aberdein de la BBC.
Los productos de Broad Group incluyen enfriadores de aire a escala industrial, purificadores de aire y unidades de aire acondicionado.
Pero ahora apuesta por los rascacielos.
En julio de 2013, sobre una parcela de tierra a una hora del centro de la ciudad de Changsha, los gerentes de Broad Group posaban junto a funcionarios locales para poner la primera piedra de un edificio, adornado con cintas rojas.
Los medios de comunicación de China informaron entonces de la inminente construcción de la torre más alta del mundo.
Pero pocos días después de la ceremonia de apertura, el trabajo se detuvo.
En China los edificios necesitan una gran cantidad de papeleo, y faltaban algunos trámites, indica nuestro corresponsal.
Pero la compañía asegura que sus dificultades radicaban en su espíritu pionero.
“El sistema y las normas legales del país aún se están poniendo al día con nosotros”, dice el gerente de fábrica Xiao Changgeng.
“Estoy seguro de que el gobierno pronto comenzará apoyarnos con nuevas políticas y normas.”
En febrero, Zhang predijo que todos los permisos necesarios para Sky City se obtendrían en un plazo de tres o cuatro meses, y que la construcción se iniciará a finales de 2015 o principios de 2016.

Napoleónico

A medida que se dirige a una sala de conferencias, Zhang Yue invoca el espíritu de Napoleón, como reporta Finn Aberdein, de la BBC.
“Napoleón conquistó el mundo con la espada, pero dijo que la mayor conquista es la del corazón. Sólo Sky City puede conquistar los corazones y las mentes de esta época turbulenta”, dice el empresario.
“Sólo hay que construirlo más alto. Un metro menos no será suficiente. Tiene que ser el edificio más alto del mundo, aunque sea un metro más alto que el de Dubai”, dice.
“Vamos a construirlo y en un par de años vamos a estar en auge”.