El productor de Hollywood, David Brian Pearce, es sentenciado a 146 años de prisión por los asesinatos de una modelo y una amiga

El productor de cine de Hollywood David Brian Pearce fue sentenciado a entre 146 años y cadena perpetua el miércoles 29 de octubre por los asesinatos provocados por fentanilo de dos mujeres.

Pearce, de 43 años, fue declarado culpable en febrero de dos cargos de asesinato en primer grado por las muertes de la modelo Christy Giles y Hilda Marcela Cabrales-Arzola. Pearce también fue condenado por múltiples agresiones sexuales a otras mujeres, según informó la Fiscalía del Condado de Los Ángeles en un comunicado de prensa el miércoles.

El miércoles, Pearce fue condenado a casi 150 años en prisión estatal. También tendrá que registrarse como delincuente sexual de por vida.

El productor de cine de Hollywood David Brian Pearce fue sentenciado a entre 146 años y cadena perpetua el miércoles 29 de octubre por los asesinatos provocados por fentanilo de dos mujeres.

Pearce, de 43 años, fue declarado culpable en febrero de dos cargos de asesinato en primer grado por las muertes de la modelo Christy Giles y Hilda Marcela Cabrales-Arzola. Pearce también fue condenado por múltiples agresiones sexuales a otras mujeres, según informó la Fiscalía del Condado de Los Ángeles en un comunicado de prensa el miércoles.

“Esta sentencia brinda una justicia largamente esperada a la Sra. Cabrales-Arzola, la Sra. Giles y a las valientes víctimas de agresión sexual que se presentaron y testificaron”, dijo el fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, Nathan J. Hochman, en un comunicado. “No solo las víctimas fueron agredidas sexualmente, sino que la vida de la Sra. Cabrales-Arzola y la Sra. Giles les fue arrebatada de una de las formas más devastadoras: una agresión sexual inducida por fentanilo a manos de Pearce. Quisiera agradecer a los fiscales adjuntos Catherine Mariano y Seth Carmack y a todos los que ayudaron en esta acusación dentro de la División de Delitos Sexuales y el Departamento de Policía de Los Ángeles, cuya incansable dedicación hizo posible este resultado”.

“Este caso es un recordatorio contundente de la devastación causada por el fentanilo. Quienes envenenan con fentanilo, dañan y explotan a otros serán llevados ante la justicia”, continuó Hochman. “Cada proceso y sentencia como esta nos acerca un paso más a disuadir a los delincuentes de cometer estos crímenes y a proteger a otras personas de un destino similar”.

En el juicio, un jurado declaró a Pearce culpable de dos cargos de asesinato en primer grado, tres cargos de violación con uso de la fuerza, dos cargos de penetración sexual por la fuerza, un cargo de sodomía mediante uso de la fuerza y un cargo de violación de una mujer inconsciente, según la Fiscalía del Condado de Los Ángeles.

Los fiscales indicaron que Pearce conoció a Giles y Cabrales-Arzola en una fiesta en un almacén en Los Ángeles en noviembre de 2021. Posteriormente las llevó a su departamento de Beverly Hills, donde les proporcionó GHB y fentanilo, “causando que Giles y Cabrales-Arzola sufrieran una sobredosis fatal”, según un comunicado de prensa.

Al día siguiente, Pearce dejó a las víctimas en dos hospitales distintos. Giles, de 24 años, ya había fallecido. Cabrales-Arzola, de 26 años, fue reanimada pero murió 11 días después, precisaron los fiscales.

En un comunicado a Entertainment Weekly el miércoles, la abogada de Pearce, Ronda Dixon, dijo que “nunca se probó” que su cliente proporcionara a las dos mujeres las drogas que las mataron.

“Mi corazón está con sus familias, pues es difícil perder a un ser querido por una sobredosis de fentanilo. Sin embargo, el mensaje que la fiscalía envió hoy es alarmante para los buenos samaritanos que intentan ayudar a alguien víctima de una sobredosis. Sin duda, la gente se lo pensará dos veces antes de llevar al hospital a alguien que crean que sufre una sobredosis”, dijo Dixon.

Un coacusado en el caso, Brant Osborn, fue imputado por dos cargos de encubrimiento posterior al asesinato. En febrero, un juez declaró nulo el juicio al no llegar el jurado a una decisión unánime. Se espera que el nuevo juicio comience el próximo mes.