El empresario teatral Carlos Rottemberg explicó en la 99.9 que ha notado una baja en la concurrencia de público durante esta temporada, teniendo como comparación el año pasado. Por otro lado, destacó que en materia de teatro “después de casi 4 décadas, sé que hay que mirar la foto completa y no la foto de una temporada”.
Sin dudas, la temporada de verano no ha tenido la cantidad de gente que se esperaba y ya no se gasta tanto dinero como antes. Esto se puede ver reflejado en muchos rubros, pero uno de los que habitualmente mide la forma en que se desarrolla la temporada, es el teatro.
El empresario Carlos Rottemberg siempre ha apostado a esta ciudad. En conversación con José Luis Jacobo, dejó en claro que los números no han sido buenos en Mar del Plata este año. “Hace 38 años que hago esto de traer teatro a Mar del Plata, y cerramos un mes de diciembre con menos ingreso de turismo, menos compañías en la primera quincena y como cuando los números van en alza, cuando hubo que decir bajo algo, también lo dije: diciembre tuvo menos gente y se vendieron menos entradas”, indicó.
Si bien hubo un lógico repunte este mes, en general los números cerrarán en baja: “en enero, de a poco, se va recuperando parte de la caída en diciembre que, estimo que cuando termine la temporada, en la actividad teatral habrá un 20% de baja respecto del año pasado”.
En medio de la discusión, aparecen los espectáculos gratuitos, ya sea auspiciados por el Gobierno o por empresas privadas, como un factor que puede influir en la afluencia de público a las salas. Al respecto, Rottemberg señaló: “Sostengo que los espectáculos gratuitos son parte de una capital del espectáculo. La entrada al teatro es una entrada, que por más que esté acotado en su precio, siempre deja una porción importante de gente. El espectáculo gratuito medido en organigrama y cantidad está muy bien. Este año nos sorprendió que de repente, distintas marcas privadas comerciales hicieron recitales gratuitos, entonces me tengo que preguntar de qué sirve hacer convenio con la Gobernación, si después en la práctica se terminan autorizando tantos que son demasiadas. Debo ser sincero: no conozco ningún éxito que se convierta en fracaso el día del recital”.
El país atravesó distintos problemas en toda su historia y el productor teatral sabe con qué se puede encontrar cuando arma la temporada. A veces, incluso, sabe que la gente se puede volcar a las salas donde están los actores del último éxito televisivo del momento: “Después de casi 4 décadas, sé que hay que mirar la foto completa y no la foto de una temporada. Trabajé en la época de la dictadura, en todos los períodos democráticos, el plan bónex, el corralito, la híper inflación, cuando no había energía y teníamos que tener las marquesinas apagadas. En todas aparecieron los temas mediáticos del momento. A Mar del Plata vienen figuras nacionales reconocidas y no les preocupa saber quién va primero y quién cuarto”, indicó. Luego abundó: “tratamos de darle espacio a todos y diversidad en la cartelera para que tengan de todo, incluidos los recitales gratuitos”.
También especificó que se debe mirar todo el panorama y no medir obra por obra, para determinar el éxito de una temporada: “Cuando hablamos de la macro, sumamos todo sin importarnos en que casillero cae el público. El éxito o el fracaso de una obra es una sortija de la calesita, son aleatorios. Lo que importa es saber cuál es la concurrencia de toda la plaza”.
Por último, se mostró preocupado por el futuro de la ciudad durante la temporada invernal: “cuando hay un mal verano en Mar del Plata, me quedo pensando, cuando me vuelvo a Buenos Aires, el invierno duro que vivirá Mar del Plata, porque tengo amigos acá. Mientras cada actividad se desarrolle bien, después me tocará a mi también”, finalizó.