“Me encontré con un espectáculo aterrador”, contó uno de los guardavidas. Fueron los primeros en auxiliar a las víctimas del rayo.
Cinco guardavidas “se pusieron al hombro” las primeras tareas de rescate de las víctimas por la caída de un rayo ayer en una playa de Villa Gesell, y “ayudaron con técnicas de reanimación cardiopulmonar a salvarles la vida”, dijo hoy el jefe de Seguridad en Playa, Carlos Churrupi, que describió el fenómeno como “algo nunca visto”.
Los primeros en llegar al balneario Afrika, de calle 123 y Costanera, fueron Mariano Pinazo, Federico Campi (del balneario Afrika), Agustín Rosberg, Karina Naja y Juan Fernández.
“Los heridos fueron atendidos por cinco guardavidas que se pusieron al hombro una misión casi imposible. En pleno caos, lograron con técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) salvarles la vida, antes de que llegaran los paramédicos”, contó a Télam Churrupi, que describió el fenómeno como “algo nunca visto”.
Pinazo, guardavidas de un balneario vecino a Afrika, contó a Télam que “al llegar me encontré con un espectáculo aterrador. Vi y escuché el rayo pero no imaginé que había tantas víctimas”.
El guardavida contó que atendió a varias personas, entre ellas a Laura Blanco, que permanecía esta tarde en terapia intensiva, y a sus dos hijos. “Estaba muy mal, la sacamos del paro y pudimos compensarla hasta que llegaron los médicos”, contó.
Junto a sus compañeros “hicimos lo que pudimos, sacamos a varios del paro cardiorrespiratorio con tecnicas específicas y con otros no pudimos evitar lo inevitable”, señaló el guardavidas aún conmocionado por la tragedia, la mayor que le tocó vivir en sus 26 años de experiencia.
“El operativo no se descontroló nunca, fue organizado y estoy seguro de que todos dimos lo máximo. A nosotros cinco se nos unieron otros guardavidas y después los demás agentes: médicos, policías, bomberos y la gente de defensa civil. Todo fue muy coordinado”, destacó.
El jefe de seguridad en Playa -encargado del desempeño de los 130 guardavidas municipales de Gesell- explicó que “tras el fuerte impacto de la corriente eléctrica, hubo gente que apareció en otro lugar de la playa y algunos que quedaron bañandose fueron desplazados con fuerza a tres o cuatro metros”, relató Churrupi.
“El destello se disparó hasta el sector cercano a las carpas, donde hay unos arbustos. Allí estaba el chico de Henderson (Gabriel Rodriguez), que fue el primero en morir”, precisó.
El operativo de playa, según Churrupi “respondió inmediatamente y ayudó a que la tragedia no fuera aún peor”. “Hemos visto rayos y relámpagos, pero lejos, cayendo en el mar; jamás que el destello se disparara al interior de la playa como ocurrió ayer”, dijo.
Churrupi contó que “estaba lloviendo cuando los guardavidas -como es reglamentario- intentaron hacer que la gente saliera del agua. Muchos lo hicieron pero la tormenta fue tan repentina que alcanzó a quienes estaban sobre todo en el sector de carpas”.