El Director del portal bioeconomía.info analizó la problemática del corte de biodiesel en el país y como eso impactó en la crisis del gasoil.
La situación del gasoil en la Argentina parece haber pasado a un segundo plano, pero en realidad, hay un problema que se generó específicamente por la acción de los gobernantes en diferentes ámbitos.
El Director del portal bioeconomía.info, Emiliano Huergo, aportó datos a través de la 99.9 de lo que ha sido en el último tiempo, el discutido corte de biodiesel en el gasoil y como eso, a las empresas no les ha caído bien: “desde que se instaló el uso de biodiesel en el gasoil, ha molestado en Argentina a un sector que no le gusta que se metan jugadores de afuera en el mercado. Al principio el corte era del 5% y no le prestaron mucha atención. Los años siguientes fueron de crisis con precios muy altos, no había gasoil ni dólares para importar en 2012 o 2013. En ese contexto, la Secretaría de Energía fue aumentando el corte hasta llegar al 10% para palear una crisis”.
El problema se dio finalmente, cuando esta ley dejó de tener vigencia y debió actualizarse: “la ley caducó el año pasado, se hizo una nueva ley y por presión de esas empresas se volvió a bajar el corte al 5%. Eso acentuó la crisis del gasoil que ahora estamos viviendo. Las petroleras prefieren importar gasoil aunque sea más caro que cortar con biodiesel, porque lo producen otras empresas, no ellos. Ahí salen a decir cosas que no son reales como que afectan el funcionamiento de los motores”.
Hay muchos casos a nivel internacional donde el corte de biodiesel llega a un 30%, por ejemplo, y sin embargo, los motores no sufren ningún problema. Incluso Huergo destacó que en Argentina se exportan motores a Brasil que se terminan usando con un gasoil que tiene un corte más alto: “tranquilamente se podría utilizar mayor mezcla de biodiesel y con eso paleamos la situación. El biodiesel producido en Argentina es más barato que exportar gasoil. Las razones por las que no se previeron estas cosas, es porque hay una política errática; estamos a la deriva en temas energéticos”.
El problema, para el especialista y también socio fundador de la Asociación Argentina de Biocombustibles e Hidrógeno, está en la falta de políticas, más que en políticas erróneas: “desde que Argentina expropió el 51% de YPF no tenemos una Secretaría de Energía, sino un Ministerio que opera para que le vaya bien a una empresa que es pública, no es una política energética”.