El ex Secretario de Energía de la Nación se refirió en la 99.9 a la decisión tomada de transferir las represas hidroeléctricas al control de ENARSA y las consecuencias que traerá.
Sin demasiada estridencia y con poca información al respecto, el gobierno nacional tomó la decisión de transferir las represas hidroeléctricas al control de ENARSA en un hecho que traerá sus consecuencias.
El Ex Secretario de Energía de la Nación, Emilio Apud, dio los detalles en la 99.9 sobre lo que esto realmente significa: “quieren establecer algunas cosas antes de irse que comprometen al próximo gobierno. Dos días antes de las PASO caduca la concesión por 30 años que tenían distintas represas hidroeléctricas y el 29 de diciembre, Piedra del Águila. Si sumás todo eso es 12 o 13% de la potencia instalada del país y la mitad de la potencia hidráulica”.
Hay herramientas que el propio contrato de concesión tiene para que se haga una transición ordenada y se pueda saber como están esas represas en la actualidad: “hasta el momento había una concesión y las cosas funcionaron bien. El contrato dice que, una vez concluido el plazo, el concedente puede dar una extensión de un año y luego decidir si se queda con las centrales, las licita o que hace. Se tomó la decisión de no dar ese plazo sin conocer el estado de las centrales, sin reconocer demandas que hacen los concesionarios de los incumplimientos de pagos según contrato en estos 30 años y quieren generar una intermediación parasitaria como hacen en la Hidrovía”.
Para Apud, todo lo que están haciendo es un despilfarro innecesario de dinero que tiene una solución muy sencilla: “no hay necesidad de hacer un organismo inmenso como ENARSA que debería desaparecer cuando termine los compromisos adquiridos, para que se quede con la mayoría y con ese organismo licitar contrato de operación y mantenimiento. No hay necesidad de esa intermediación. Todo esto lo termina pagando el usuario porque aumentará el costo del kilovatio/hora”.
Luego de detallar todo lo que se ha hecho mal, explicó desde su punto de vista cuál sería el camino ideal: “lo que habría que hacer es extender un año más las concesiones y en ese año resolver todos los problemas económicos de incumplimiento de contratos; hacer los estudios de ingeniería para ver en que estado están las centrales que llevan 40 años funcionando. Luego llamar a una licitación nacional e internacional para las empresas que quieran participar por “x” años de concesión, haciendo las inversiones necesarias para extender la vida útil de las centrales y que coticen un costo de kilovatio/hora”.
Lo cierto es que en materia energética, para Apud el kirchnerismo ha generado una devaluación total de todos los aspectos importantes para la independencia del país e incluso el crecimiento y la generación de divisas: “acabamos de cumplir 20 años de populismo energético el 25 de mayo. Hoy tendríamos que estar exportando gas natural licuado, tendríamos que tener el doble de energías renovables, tendríamos que estar con hidrógeno pero nadie quiere poner plata en Argentina. Esto el próximo gobierno tendrá que resolverlo porque quedarán miles de millones de dólares bajo tierra”.