Por decreto se establecieron compromisos de gestión para los centros de reclusión. A los jerarcas de cárceles que los cumplan se les dará una partida especial. Se pierde toda la partida en los casos de fuga en que el preso no sea recapturado.
El presidente José Mujica aprobó por decreto el “compromiso de gestión respecto de los equipos de dirección de las unidades de internación de personas privadas de libertad”, pertenecientes al Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), para el periodo comprendido entre los meses de enero y diciembre de este año 2014.
El fin de este compromiso de gestión es “generar un cambio en la cultura organizacional y gestión en las unidades de internación”, expresa el texto del decreto. Si el centro cumple las metas se le dará el 100% de una partida que se pagará en 40% para el director y el resto para los subdirectores, repartido en 20% para seguridad, 20% para tratamiento y 20% para administración.
Entre los objetivos a que se compromete el Ministerio del Interior está mejorar la alimentación de la población privada de libertad, mejorar la gestión de la flora vehicular y evitar las fugas de las personas privadas de libertad de las unidades de internación.
A su vez, las unidades de internación de las personas privadas de libertad asumen compromisos. Entre ellos está el “promover el respeto a la dignidad humana en la custodia y tratamiento” de lo detenidos, por lo que tendrá en cuenta los hechos de corrupción o malos tratos a los presos.
En el ítem referido al objetivo de evitar las fugas de las cárceles, se indica que a 0 fugas se cobra el 100%, pero si dentro de las 24 horas de la fuga se recaptura a la persona se cobra el 50%. No se cobra nada si no se captura o esto ocurre pasadas las 24 horas de la fuga.
Presos
El informe Población del Sistema Penitenciario a Junio 2014, elaborado por la Subdirección Nacional Técnica del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR) indica que el 93.7% de las 9.757 personas privadas de libertad son hombres y el 6,3% restante mujeres.
El 67% de estas mujeres están en establecimientos de reclusión que no son exclusivamente femeninos y el 33% en establecimientos que sí lo son.
El sistema también atiende a 30 niñas y 31 niños que viven con sus madres en prisión, además de que, según los registros a junio, 15 mujeres privadas de libertad estaban embarazadas.
La Unidad N° 9 El Molino (ubicada en el barrio Paso Molino de Montevideo) es el que registra más casos. En él hay tres gestantes, 14 niños y 16 niñas.
Este centro fue inaugurado en el año 2010 y está destinado fundamentalmente para madres con hijos. La cárcel ubicada en Vicente Basagoity casi Emilio Romero fue durante muchos años hubo un hotel de alta rotatividad.
El 92% del total, 8970 personas, está hoy en establecimientos que funcionan dentro de la órbita del INR; los demás en dependencias que dependen de jefaturas departamentales.
El 58% de la población reclusa está en establecimientos con más de 1.000 detenidos, el 21%% en centros con entre 50 y 349 detenidos, el 20% en lugares de entre 350 y 999 presos y el 1% en otros de menos de 50.
En tanto, el 59% de la población reclusa es reincidente y el 41% es primaria. Hay 5.770 procesados y 3.977 penados en los presos del país.
Unificar
El subdirector técnico del INR, Gustavo Belarra, destacó que unificar el sistema penitenciario fue clave para su ordenamiento.
Belarra dijo a la página web de Presidencia que en el año 2010 se comenzó ese proceso y resta el pasaje de seis unidades de reclusión en el interior al INR. Estos centros están distribuidos en Tacuarembó, Paso de los Toros, Flores, Florida, Durazno y Treinta y Tres, y el tiempo máximo previsto de traslado es 2015, acotó.