El descubrimiento ha sido posible gracias a los datos recopilados entre los años 2009 y 2013 por el satélite GOCE de la ESA.
En las profundidades de la capa de hielo de la Antártida se esconden restos de antiguos continentes perdidos, según un estudio publicado esta semana en la revista Scientific Reports.
Con base en la información recopilada por el satélite GOCE de la Agencia Espacial Europea (ESA), que entre los años 2009 y 2013 estudió la gravedad terrestre, combinada con los datos sismológicos, un equipo de investigadores de la Universidad de Kiel de Alemania y de la Investigación Antártica Británica ha obtenido un mapa 3D de las placas continentales, en particular de la Antártida.
Según los autores del trabajo, este mapa ayudará a entender cómo interactúan la tectónica de placas y la dinámica del manto profundo. Estas imágenes “están revolucionando nuestra capacidad de estudiar el continente menos conocido de la Tierra”, comentó Fausto Ferraccioli, uno de los autores del estudio
Bajo la parte oriental de la Antártida se encuentra un “emocionante mosaico de características geológicas que revelan similitudes y diferencias fundamentales” entre la corteza debajo de ese y otros continentes, a los que se unió hace 160 millones de años, agregó Ferraccioli.
En el marco de ese mismo estudio, también se ha descubierto que la Antártida occidental tiene una corteza más fina que en la parte oriental, constituida por antiguos cratones separados por estructuras más jóvenes, que tienen un “parecido familiar” con Australia y la India.
La ESA señala que estos hallazgos son de interés geológico, más que puramente histórico. Además, brindan pistas sobre cómo la estructura continental de la Antártida está influyendo en el comportamiento de las capas de hielo, y con qué rapidez estas se recuperarán del derretimiento.