El referente de la Agrupación de Familiares y Amigos de Víctimas de la AMIA, Sergio Burstein, habló esta mañana en la 99.9 sobre los dichos de Sofía Guterman ayer en el acto a 19 años del atentado, donde lo criticó por su cercanía al Gobierno nacional. “Me siento identificado con este gobierno. Y como vivimos en un país democrático, tengo el derecho de hacerlo”, destacó. “Como persona, deja mucho de desear”, dijo, refiriéndose a Guterman.
No fue un aniversario más. Ayer, a 19 años del Atentado a la AMIA, la tragedia fue recordada con un acto donde nuevamente la política fue el gran protagonista. Las palabras de Sofía Guterman, familiar de una de las víctimas, no cayeron bien en algunos sectores, ya que criticó a Sergio Burstein, referente de la Agrupación de Familiares y Amigos de Víctimas de la AMIA por su cercanía con el Gobierno nacional.
Esta mañana en la 99.9, Burstein habló sobre sus sensaciones después del acto y destacó que “todos tienen el derecho de dar su opinión sobre lo que quieran, pero no pueden mansillar, avasallar, calificar, criticar o utilizar a otro familiar para posicionarse. Es la mamá de una víctima y merece todo el respeto de todo el mundo, pero así también tiene que respetar a los demás”.
Hilando fino en las palabras de Guterman, Burstein puntualizó: “no puede decir que hemos vendido la sangre de nuestros muertos o que la hemos negociado. Por eso digo que se han roto códigos. Ni siquiera en los momentos más álgidos de la investigación cuando no nos hablábamos con la gente de Memoria Activa, tuvimos una palabra en contra de otro familiar”. Luego abundó: “el respeto significa que tenemos derecho a pensar y a hacer lo que nos parezca, en la medida de que esto sea con buena intención”.
Hay muchos familiares que todos los años esperan la misma fecha para recordar a sus víctimas, pero suceden cosas que poco tiene que ver con el homenaje: “era un acto importante y se transformó en una vergüenza. Es incalificable que un familiar hable así. Se refirió a mi persona sin decir que era yo. Concurro a actos del Gobierno y me siento identificado con este gobierno; como vivimos en un país democrático, tengo el derecho de hacerlo”.
Notablemente enojado por las declaraciones de Guterman, Sergio Burstein subrayó también que “la descalificación para buscar un aplauso barato hace que la siga respetando como mamá, pero como persona deja mucho que desear. Ayer, rompió un código. Hubo familias que fueron a recordar a sus familiares y recibieron un cachetazo de alguien que se cree la dueña de la verdad”.
El memorándum
Burstein también opinó sobre la firma del memorándum con el gobierno de Irán que propuso la presidenta Cristina Fernández, un tema que también se tocó en el discurso de Sofía Guterman: “cuando ella compara el memorando con el genocidio llevado adelante por el proceso militar en Argentina, es de una ignorancia que me da mucha pena. Es apelar a una terrible bajeza. Nadie se puede arrogar el derecho de ser mejor que otra persona porque tiene un micrófono adelante. Hizo algo personal y arruinó lo más importante que había, que era honrar la memoria de las víctimas”.
Luego opinó que “el memorándum es una herramienta política para destrabar el parate desde hace años, donde Irán se niega a entregar a las personas. Avanzar significa dirimir ante un tribunal oral y público la responsabilidad o no de estos señores acusados por la justicia argentina de haber planificado y llevado adelante el atentado a la AMIA. Si no llegamos al juicio oral, vamos a estar de por vida sin saber la verdad”.
Por otro lado, aclaró que nada se define a través de este documento y que hay otros factores que influirán en la resolución: “tuvimos que llegar a un acuerdo, que por más que lo firme Irán, el que tiene la última palabra es el juez. Si entiende que no están dadas las condiciones cuando tenga que viajar, se terminó el acuerdo”.
Refiriéndose al punto más importante de la investigación, comentó: “no se habló de por qué se tapó la pista más fuerte del atentado que hasta el fiscal Nisman asumió. Esta señora está tan mal informada que dijo algo fuera de lugar, acusó al juez Lijo de detener la causa; pero como no actúa en la causa, se olvidó que fue Lijo el que elevó la causa a juicio y están próximos a ser juzgados todos los que desviaron y encubrieron el atentado a la AMIA”.