El titular de CAFREXPORT, Ciro D´Antonio, definió con esas palabras la oportunidad de apertura de mercado en Rusia para los alimentos del país después de que el presidente Putin modificara la lista de productos con restricción para importación. “Hay algunas autoridades que se movieron muy bien y mandaron los excedentes de exportación que tenemos para hacérselo llegar a las autoridades de Rusia”, remarcó.
A veces las crisis internacionales representan una oportunidad de apertura de mercado. Eso está sucediendo hoy con Rusia que bloqueó el ingreso de alimentos desde Estados Unidos y la Unión Europea durante un año y eso le abre las puertas a distintas industrias de nuestro país.
Esta mañana, en la 99.9, habló sobre el tema el titular de CAFREXPORT, Ciro D´Antonio, quien advirtió que “hay que tener en claro que la medida es por un año, pero tuvo una reacción inmediata. Hay algunas autoridades que se movieron muy bien y mandaron los excedentes de exportación que tenemos para hacérselo llegar a las autoridades de Rusia. En la primera quincena de septiembre hay una exposición en Moscú y la idea es aprovechar estos eventos para esto que durará un año”.
Han sido tan inflexibles con la decisión que incluso han regresado comida que ya había llegado a puerto: “las autoridades rusas son muy drásticas con estas medidas, incluso mercadería ya arribada a los puertos fue retornada a destino. Hay una demanda de alimentos y Latinoamerica puede abrir un mercado para tener más ventas”. A partir de esto, es que los empresarios argentinos empezarán a buscar ese nuevo destino: “estamos indicando cuál es la oferta exportable para el presente año y el 2015. Puede afectar un poco al mercado brasilero porque los precios de Rusia son más atractivos”, anticipó D´Antonio.
De todas maneras, no quiso exagerar en la reacción ante la medida porque es de muy corto plazo: “es una oportunidad, pero no es una solución ni mucho menos porque es un programa corto de ventas intensivas que dura un año”, aseguró.
A pesar de esta buena noticia, en el plano interno se informaron cifras que hablan sobre una estabilidad en los desembarques, algo que el titular de CAFREXPORT se encargó de refutar: “las estadísticas no siempre reflejan bien las cosas. Hay diferencias entre los números de la Aduana, respecto de lo que se captura y del INIDEP o SENASA. Incluso algunos están muy mal. No debería ser complejo tener esos datos, pero hay que tener voluntad para hacerlo”.
Lejos está de ser positiva la situación y eso también lo dejó en claro: “andando en la calle, uno se da cuenta que la crisis existe. Ahora o antes ha habido errores en los datos de los desembarques”, concluyó.