Jessica Callejo sufrió el acoso de su ex marido durante casi dos años. Recibió golpes, la quiso atropellar con un taxi y llegó al límite de sacarle a uno de los hijos de ambos. Esta mañana, en la 99.9, habló sobre su desesperante situación: “Esto no tiene nombre, no te podés imaginar lo que sentís”, afirmó.
Foto: Que Digital
Las situaciones de violencia de género han tomado mucha repercusión en los últimos meses, sobre todo porque las víctimas se han animado a denunciar los abusos. En las últimas horas, se hizo visible un nuevo caso, el de Jessica Callejo.
Su ex marido, la ha estado amenazando de un tiempo a esta parte e incluso la ha llegado a golpear, la intentó atropellar con un taxi y se ha llevado a uno de los dos hijos de ambos y no se lo quiere devolver.
Esta mañana, Jessica habló en la 99.9 y señaló que, a pesar de la exposición pública, “todavía no pasó nada. Mi ex marido sigue libre, sale diciendo cosas que ni quiero escuchar. La justicia no hace nada”. Fueron casi 13 años de matrimonio, pero ella destacó que “siempre fue una persona violenta, pero todas las agresiones fueron después de que nos casamos; cada vez eran más fuertes”.
A pesar de contar con dos hijos (uno de 10 y otro de 12), no hubo nunca piedad para ella. Ni de parte de su ex marido, ni de la justicia que no ha movido un dedo para capturarlo: “en esta última semana presenté cuatro denuncias. Te presentás, decís lo que te pasa, estás tres horas esperando a pesar de que explicas toda la situación. Él me amenaza y luego lo hace, pero no le dan bola”, dijo.
Sobre él incluso pesa una orden de restricción de acercamiento, pero no le importó demasiado y siguió avanzando contra Jessica con hechos cada vez más violentos: “se metió adentro de la casa de una amiga teniendo una restricción de acercamiento, se metió en el lugar donde trabajo y me golpeó. Fui a decirlo y nadie se hizo cargo de nada. Me dicen que no puedo ir a buscar a mi hijo sola, pero nadie hace nada”, reiteró incrédula por la desidia que la rodea.
Hoy, siendo la víctima de esta situación, tiene que pasar por un martirio para encontrar alguien que la pueda ayudar y no sufrir más estos ataques. “El problema es que el gobierno algo debe hacer porque no pueden estar los papeles guardados y archivados con la gente violenta suelta. Las víctimas están encerradas sin poder salir de su casa. Estoy cansada de esto, me duele todo el cuerpo ¿con qué necesidad?, ¿Por qué se aprovechan? No es justo”, afirmó.
Mientras tanto, el agresor sigue desarrollando su vida con total normalidad y eso es algo que genera aún más impotencia: “mientras yo tengo que estar haciendo revisiones médicas, él sigue trabajando como si nada. Esto no tiene nombre, no te podés imaginar lo que sentís”, dijo sobre los abusos de los que fue objetivo. “Se llama Claudio Alejandro Tarsano, trabaja en una bicicletería en la avenida Colón. Antes era taxista, pero con lo que me sucedió a mí no lo dejaron trabajar más ahí”, aclaró sumando datos de su ex marido.
En pleno estado de desesperación, lo único que pretende Jessica es estar con sus hijos teniendo en cuenta la naturaleza violenta de Tarsano: “nunca fue un padre, en el colegio no le conocen la cara. En la última fiesta de egresados no estuvo, le entregaron a Joel, el hijo que está con él la medalla al mejor compañero y él no estaba. Puede decir lo que quiera, pero no que he sido una mala madre. Amo a mis hijos y son lo único que me importa”, aseguró Callejo mientras sigue aguardando una respuesta.