El Defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino, opinó en la 99.9 sobre las medidas del gobierno nacional y advirtió que “no se trata de una reforma estructural, es más de lo mismo que ha ocurrido a través de la historia”.
Las medidas que está tomando el gobierno de Mauricio Macri respecto de los jubilados, no son las que se esperan o al menos, las que se había comprometido a llevar adelante. El Defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino, dio su punto de vista en la 99.9 indicando que “es más de lo mismo que ha ocurrido a través de la historia de nuestra seguridad social donde lo distintos gobiernos se apropiaron de recursos del sistema y luego se generan efectos negativos que se manifiestan con bajos haberes para los jubilados. Estamos hablando de 7.200 pesos de mínima, con una canasta que está en 17.000 pesos. Esto lleva a la quiebra del sistema”.
Este tipo de situaciones llevan a otros movimientos posteriores que se han repetido en la historia y que nunca soluciona los problemas de fondo. Semino señaló que “se debe retomar lo que dijo el presidente. Habló de la reforma estructural del sistema de seguridad social y en paralelo aparecieron estas medidas como la edad, el régimen para autónomos, un supuesto 82%, la supuesta movilidad. Lo que hay es la conformación de un Frankenstein, algo habitual en la Argentina”.
Con su experiencia en reuniones que se realizaron en distintos países del mundo, hay una manera de trabajar estos temas que se debería implementar en el país: “cuando en otros países se detecta que hay una crisis en el sistema, lo primero que se hace es juntar a las fuerzas políticas y sociales en un mismo ámbito para plantear el núcleo del problema y las hipótesis de solución. Tenemos más de la mitad de los jubilados con haberes mínimos y nunca antes el jubilado logró cubrir el 40% de su canasta básica. Ese es el problema central”.
Teniendo en cuenta ese diagnóstico, el Defensor del Pueblo de la Tercera Edad señaló hacia donde deberían partir los debates: “la primera hipótesis de solución es establecer el financiamiento. Eso decanta en como disminuir el 34% del trabajo en negro, como reemplazar los impuestos que lo están financiando totalmente por un sistema de rentas. Ese es el debate que se debe el sistema institucional argentino y no las histerias de poner tal o cuál medida porque en medio está el jubilado muriéndose de hambre”, sentenció.