El Defensor del Pueblo de la Tercera Edad indicó en la 99.9 que jubilarse en Argentina es como ingresar en la indigencia: “para cubrir su canasta básica, los jubilados necesitan tres haberes mínimos”.
La jubilación en Argentina más que un premio al trabajo de toda una vida parece un castigo perpetuo. El Defensor del Pueblo de la Tercera Edad, Eugenio Semino indicó que jubilarse en nuestro país es lo mismo que ingresar en la indigencia.
En la 99.9 amplió ese concepto: “la realidad y los números lo remarcan. La gran mayoría de los jubilados tiene una pensión mínima de 25.900 pesos, son personas que trabajaron 30 o 40 años, criaron a una familia y se esforzaron para hacer posible esta sociedad, además de sufrir como nadie la pandemia y lo que llamamos el para-COVID que es la falta de rehabilitación y de seguimiento en los tratamientos”.
No sólo los datos del INDEC son los que evidencian este deterioro del dinero recibido sino los propio controles que realizan desde la Defensoría: “en cuanto a lo económico, habíamos publicado el 6 de octubre la canasta del jubilado que nos marcaba un aumento interanual de los costos del 52%. Entre abril y octubre tuvimos un aumento del 18% de los gastos llevándola a 75.500 pesos. Para cubrir esa canasta el jubilado debería cobrar tres mínimas. Cuando se habla miserablemente de un bono que no llega o de una tarjeta Alimentar en 6 mil pesos, se está pensando en realidad en que esta administración transformó el derecho previsional en un subsidio. Está por debajo de los índices de pobreza e indigencia del ANSES y además, por debajo del salario mínimo, vital y móvil. Esto no se habla en la campaña electoral”.
Para Semino, más allá de tener una mejor Ley de Movilidad se necesita sincerar la situación, algo de lo que efectivamente no se habla: “la ley actual en el primer semestre le hizo perder a los jubilados 5 puntos respecto de la inflación y 7 puntos respecto de su canasta. No hay ley que pueda funcionar sin una cláusula garantía respecto de la inflación, por otro lado la Ley de Movilidad puede mantener un reajuste pero no recomponer el haber. Hay que llevar las mínimas al nivel de la canasta y a partir de ahí, sacar una nueva Ley de Movilidad”.
El gobierno de Alberto Fernández ha terminado de destruir a los jubilados que era uno de los caballitos de batalla que utilizó durante la campaña y no estuvo ni cerca de cumplir. “Hay una gran mentira instalada por esta administración que es la famosa redistribución de la riqueza. Acá lo único que se da es la redistribución del ingreso. Se le saca dinero a los pobres para dárselo a los más pobres. El Fondo de Garantías y Sustentabilidad no existe más, está lleno de papeles. Durante estos dos años no hubo ninguna rendición de fondos, como dice la ley de creación del Fondo”, finalizó Semino.