Los tribunales de Hamburgo decidieron suspender el juicio contra el obispo de Limburgo, Tebartz-van Elst, a cambio del pago de 20.000 euros.
El religioso deberá abonar 20.000 euros para que el proceso quede en suspenso. El “obispo de lujo”, como se lo denomina, había sido acusado por la Fiscalía de Hamburgo de dar falso testimonio bajo juramento al declarar en relación con un vuelo hecho en primera clase a la India. Fue suspendido provisoriamente del cargo por el Vaticano después de que se dieran a conocer públicamente las sumas desembolsadas por su diócesis.
En Alemania, los feligreses pagan impuestos que luego son redirigidos hacia las respectivas iglesias. Sin embargo, en el caso de la iglesia católica el Estado tiene una participación financiera en las cuentas eclesiásticas que supera los aportes de la feligresía.
El politólogo Carsten Frek apunta que 500.000 millones de euros provenientes de las arcas públicas regionales son destinados al pago de los obispos. Según un aporte publicado en el blog del periódico Handelsblatt, los sueldos que reciben los obispos son equiparables a los salarios percibidos por funcionarios públicos de alto rango.