Fabián Calle: «La operación de Ucrania tiene un impacto emocional muy fuerte»

El analista internacional habló en la 99.9 sobre las operaciones que llevó adelante Ucrania en territorio ruso y el impacto que tendrán.

Los ataques de Ucrania en territorio ruso han generado una modificación en el modo en que se lleva adelante internamente la guerra que inició Putin. Sin embargo, para los especialistas, en el frente de guerra no cambia demasiado.

El analista internacional Fabián Calle, analizó el tema en la 99.9 indicando que hay tres planos distintos de análisis de la situación: «Uno es la calidad que ha demostrado Ucrania en todo lo que es guerra partisana, que ya viene de lejos. Una tradición de la época de la revolución soviética, cuando unos sectores en Ucrania se oponían a la revolución soviética, después de la Segunda Guerra Mundial y hay toda una tradición de partisanos y de guerra simétrica muy importante. Lo segundo es la capacidad que tiene un segmento grande de la población ucraniana de poder mimetizarse dentro de Rusia por afinidad idiomática y estética. Y tercero, un aparato de inteligencia que ha demostrado gran eficiencia y contundencia en ataques, matando generales, algún que otro destacado funcionario del aparato de inteligencia, asesinatos en Moscú. Y esta es como la coronación, una operación propia de película que tiene un impacto emocional fuerte en Ucrania y genera serios problemas y seguramente purga dentro de Rusia. No cambia el día a día del frente de batalla, que es un frente de infantería contra artillería, donde Rusia avanza, si uno agarra los últimos 16 o 18 meses, avanza 50 metros por día que es nada».

Para Rusia se plantea un verdadero problema porque se está haciendo un esfuerzo total en esta guerra tratando de invadir Ucrania, pero a la vez, los están atacando dentro de su propio territorio generandoles pérdidas estratégicas y millonarias: «hay por un lado grandes operaciones que generan shock emocional, que generan daños logísticos pero eso no se traslada tan mecánicamente al frente. Rusia está gastando más del 40% de su presupuesto nacional de defensa. Es un monto que obviamente implica que en un montón de otras áreas no se está haciendo nada. No es muy sostenible en el tiempo y los daños cuando se salga de esa economía de guerra, donde toda fábrica se dedica a hacer armamento, después al momento de la paz, transformar eso en abastecer otra vez al mercado civil va a provocar serios problemas».

En medio de ese escenario está la siempre cuestionada figura del presidente de Estados Unidos, Donald Trump: «él tiene un objetivo mayor. Trump es presidente de EE.UU. y a su vez, como todo presidente americano de los últimos 80 años, es un emperador, tiene un imperio. Entonces tiene ese doble comando. Y a nivel de emperador lo que él necesita es abrir un canal de diálogo con Rusia. No para ser aliado, pero al menos para no regalarle Rusia a China. Lo que ha pasado con la guerra de Ucrania y el error de cálculo de Putin de pensar que eran tres semanas y terminaron siendo más de tres años, pinta para cuatro, es que queda con una sola puerta de acceso al mundo y es el mercado chino. Se le cerró el europeo, el americano, el de Japón y el de Corea del Sur. En términos estratégicos EE.UU. tiene un solo rival que es China. En ese juego no le puede regalar Rusia a China. Lo primero que necesita para eso es abrir un canal de diálogo con Putin».