Fabio Quetglas: “Nuestro diagnóstico es que el estado provincial está peor que el nacional”

El Diputado Nacional forma parte de un grupo de personas del radicalismo que está diseñando un plan de gobierno para el radicalismo en la provincia de Buenos Aires y contó los detalles en la 99.9.

El radicalismo está desarrollando un proyecto para un gobierno próximo en la provincia de Buenos Aires que podría estar encabezado por el marplatense Maximiliano Abad. En ese sentido, se han formado equipos de trabajo para tener un diagnóstico y empezar a trabajar proyectos que puedan tener preparados en caso de un eventual triunfo en las elecciones de este año.

Uno de los que más está trabajando en ese sentido es el Diputado Nacional Fabio Quetglas que habló en la 99.9 contando que “coincidimos con Maxi Abad que hace muchos años que la provincia de Buenos Aires ha sido un espacio subalterno a la propuesta nacional, depende en gran parte de como le va al proyecto nacional. La provincia tiene particularidades que merecen una mirada específica. Hubo un trabajo de un año de la Fundación Poder del Radicalismo liderado por Alejandra Lorden donde hubo mucho grupos humanos que fueron organizados para darnos una mirada específica de la provincia”.

A partir de ahí, plantearon un escenario desde el cuál hay prioridades para armar proyectos: “nuestro diagnóstico es que la situación del estado provincial es peor que a nivel nacional. Hay mayor desjerarquización, políticas públicas más erráticas, más desfinanciado y con una peor implantación territorial. El estado nacional tiene un grupo de problemas y la provincia parece agravarlos”.

El grupo de trabajo ha puesto su mirada particularmente en cuatro ejes: “el primero es la descentralización territorial porque los bonaerenses sienten a su estado lejos física y conceptualmente. Otro tema es la estabilización fiscal de la provincia que logró modelos a través de la desinversión, se cierran las cuentas pero de una manera horrorosa. Para tener un buen programa fiscal, con menos impuestos, hay que tener una buena estructura presupuestaria. Hay una pata de políticas sociales donde hay educación, salud y otras cuestiones donde debemos proveer en cantidad y calidad suficiente esos servicio. Son un espacio de integración cívica, soñamos con la escuela pública donde se encuentran las personas de distintos sectores sociales recibiendo una educación de calidad. El último punto, es seguridad y justicia que creemos que está en el top de las preocupación de los ciudadanos. Si uno mira en el largo plazo, el delito desde 1980 se ha triplicado. El standard de seguridad no lo podés cambiar en 15 días. Si hacés las cosas bien, tardás 10 años. Es lo que ha llevado en distintos lugares del mundo”.

El déficit habitacional es otro gran inconveniente que no se ha resuelto históricamente e incluso se ha agravado porque siempre se montó un negocio en torno a las necesidades de los bonaerenses: “si creemos que vamos a solucionar el problema de la vivienda haciendo viviendas, estamos muy equivocados. Una vivienda barata en Argentina no sale menos de 50 mil dólares y si faltan 4 millones de viviendas, no hay forma. Lo que hay que generar es suelo urbano, con lotes de calidad con título, cordón cuneta, agua y demás a un costo de 10 mil dólares. Se lo podés proveer a una familia con la intermediación de un banco público para que lo pague a 8 año y se haría el esfuerzo de pagarlo por parte de familias de nivel medio-bajo”, propone Quetglas.

El kirchnerismo siempre dice que hace en este tema, pero no tiene una política definida, sino que por el contrario hace favores políticos como sucede, por ejemplo, con Maira Mendoza en Quilmes: “el kirchnerismo tiene todo un relato, pero no tiene política de integración urbana. El lugar donde vivís no tiene porque determinar tu pertenencia social. Esa idea de los barrios donde no entra la policía es muy complejo, hay un modelo de abandono estatal que tiene que ver con las compensaciones como negocio y la clientelización que forma parte de nuestro empobrecimiento político”.