El presidente de la Cámara de Comercio de Posadas (CCP), Fernando Vely, se refirió en la 99.9 a la cantidad de argentinos que cruzan la frontera para comprar comida y electrónica a Paraguay donde hay precios mucho más baratos. “Seguimos siendo un país caro y hemos quedado fuera de competencia, lo cuál se repite con falta de trabajo y comercios que están cerrando”, remarcó.
Como sucede desde hace unos meses con Chile, Paraguay se ha transformado en otro de los destinos elegidos por los argentinos para hacer compras. Este fenómeno, lo explicó en la 99.9 el titular de la Cámara de Comercio de Posadas (CCP), Fernando Vely: “Misiones tiene un 90% de frontera internacional con 40 pasos fronterizos y cuando la situación de la moneda y otras cuestiones, hacen que los precios de Brasil y Paraguay estén más bajos, se genera un ingreso masivo de productos de contrabando y también las compras que hacen los misioneros en estos países”.
La situación actual le hizo recordar a lo que sucedió hace 2o años aunque hay cambios notables en el contexto general: “volvimos a caer en la década del 90 donde veíamos que miles de misioneros cruzaban a comprar en Paraguay. La diferencia es que en ese momento nuestro competidor era un mercado que se estaba desarrollando, pero hoy por hoy con el pasar de los años y el beneficio de una carga impositiva mínima, se han desarrollado con el tiempo. Tienen 12.500 comercios contra 8.500 que tenemos nosotros”, puntualizó.
El mercado argentino, en la actualidad, no puede competir con los precios que ofrece Paraguay y eso tiene que ver con las condiciones que ofrece cada gobierno para el desarrollo: “ellos tienen un IVA diferenciado que es de 10,5%, el impuesto a las ganancias es un 10% contra el 35%, aranceles de importación en China a cero, energía más barata, combustible y gas también; además de costos laborales que están por la mitad de los nuestros”, explicó Vely.
Además de la presión tributaria, la inflación es otro de los grandes problemas de competitividad para Argentina: “nos fue dejando fuera de competencia con responsabilidad de varios sectores. Seguimos siendo un país caro y hemos quedado fuera de competencia, lo cuál se repite con falta de trabajo y comercios que están cerrando. Todo el dinero que se va es difícil de recuperar”.
No sólo los misioneros deben competir con el mercado paraguayo, sino que ese dinero que cruza la frontera, significa que se cierren también distintos comercios: “sólo en Posadas hay 300 comercios cerrados sobre una base de 8.000. Hace 2 meses el Ministerio de Trabajo declaró que se perdieron más de 10.000 puestos de trabajo formales y si asumimos que por cada trabajador formal hay dos informales, las pérdidas podrían llegar a 30.000 puestos”, indicó alarmado por la situación.
Como si todo ese contexto fuera poco, no hay controles de la gente que cruza la frontera, a punto tal de transformarse en el principal centro de ingreso de personas al país. “Somos el primer paso fronterizo del país y el segundo también porque es Foz de Iguazú; recién el tercero es Ezeiza. El año pasado habíamos tenido 8 millones de personas que cruzaron la frontera y este año se incrementó en un 50%: han cruzado 12 millones de personas”, finalizó.