Una vecina de la ciudad habló en la 99.9 sobre la situación que está padeciendo con su hijo que está con su padre por una restricción de acercamiento que pesa sobre ella.
Las situaciones que generan los Tribunales de Familia en nuestro país son desesperantes y no parecen estar en búsqueda de la verdad detrás de los hechos. Son varios los tribunales que trabajan de esta forma y en este caso, Florencia ofreció un testimonio de lo que está viviendo en un esto de desesperación absoluta.
En este caso, el inconveniente, según comentó en la 99.9 lo tiene con la jueza Lazcano: “no soy solamente yo la que padece esta situación, esta negligencia, esta falta de amor y empatía no solamente hacia los adultos sino a los niños, que son lo importante, creo que no solamente en esta ciudad, sino en el mundo, porque está todo es un caos lo que está sucediendo y en este caso me tocó a mí”.
Florencia tiene dos hijos, uno de cinco y otro de siete años y está sufriendo una situación particular con el menor de ellos: “mis hijos son de padres diferentes y mi situación es ahora con mi nene menor, se llama Samuel. Esto comenzó hace un año atrás, en ese momento básicamente el padre de mi hijo lo secuestró, suena muy cruel pero en ese momento yo no tenía dimensión de las cosas y me enteré recién este año, cuando abordo mi situación con mi actual abogada. En ese momento yo lo voy a buscar al jardín, el nene no estaba y hacía varios días que no estaba yendo al jardín. Me trato de comunicar con su papá, no había respuestas. Justo él se estaba mudando de casa, yo no sabía cuál era su dirección nueva. A todo esto me entero horas más tarde que el nene estaba con su papá, pero esa sola fue la información que me dieron. Me dijeron ya te vas a enterar. Hubo denuncias penales de violencia hacia mí y mi pareja, las cuales tardaron un montón de tiempo, pero se resolvieron. Y ahora lo que nos falta es resolver lo de familia. Por el contrario, lo único que hacen es perjudicar a mis hijos, porque no solamente Samuel está sufriendo, también mi hijo más grande, llora todos los días, no tiene consuelo, extraña a su hermano. Ellos se criaron juntos, básicamente desmembraron una familia”.
Han presentado pruebas y realmente no sabe como seguirá la situación porque día a día, la mantienen alejada de su hijo: “lo único que tiene son pruebas de parte de nosotros. Tenemos hasta testigo de una niñera del nene que lo cuidaba y veía como el padre iba a comprarse cerveza, volvía y el nene lloraba porque tenía hambre y él no le compraba absolutamente nada. Todo esto fue armado por él y lo dijo la propia niñera y ellos hacen caso omiso, cierran los ojos. Realmente no sé qué es lo que pasa, porque yo siento que no me escuchan en ningún lado. Yo no sé si acá está corriendo plata, que es lo que está sucediendo, pero esto no puede seguir. Hace dos meses que no sé nada de mi hijo”.
En medio, aparecieron las medidas restrictivas por parte de la propia jueza que lo mantiene aislado del resto del grupo familiar: “no sé nada formalmente porque hace como cuatro o cinco meses, ella toma la decisión de hacer una restricción de acercamiento mutua entre padres. Como él es de Corrientes, no tiene familia, no tiene amistades, no tiene nada acá, lo que hace es cortarme un poco el contacto con el nene, porque yo no tenía forma de comunicarme, era solamente los días que me correspondía verlos. Después de eso toca el impedimento de contacto con mi hijo. Yo no podía ver a mi hijo por falsas denuncias de este señor. De todo tenemos pruebas, todo se resolvió y no resuelven absolutamente nada. Ayer me mandó mi abogada un escrito que recién yo puedo empezar a verlo con la psicóloga de mi hijo de por medio, a la cual yo no presté consentimiento para que el nene vaya, porque estoy segura, más que segura, que todo eso está arreglado entre ellos. Yo puse tres psicólogas diferentes, las cuales pagué y estaba dispuesta a que sea cualquiera de Mar del Plata, menos la que ellos estaban poniendo, porque ellos estaban muy empeñados en que sea ella. Si vos no tenés nada para ocultar, podes poner cualquier persona. Ellos querían que sea ella. Me negué y de igual forma el nene está siendo controlado por esta psicóloga y ahí tengo que ir yo a exponerme a ver a mi hijo”.
Florencia dejó en claro que no ve salida a la situación y en su desesperación, decidió dar a conocer el caso: “tener que estar haciendo esto para mí es horrible y humillante, porque no solamente me expongo yo, sino que expongo a mis hijos y esto se tiene que terminar porque la jueza nunca responde a los escritos de mi abogada. La indiferencia, no puede seguir así, no soy la única que le suceden estas cosas”.