El nuevo programa educativo de la ministra Najat Vallaud-Belkacem apuesta por practicar “una pedagogía de entrenamiento cotidiano y repetición. Busca “consolidar los saberes más simples antes de desarrollar los más complejos”.
La ministra de Educación francesa, Najat Vallaud-Belkacem, ha anunciado en una tribuna publicada en Le Monde, las medidas que quiere a aplicar en su proceso de “refundación de la escuela”. Una reforma que debería entrar en vigor para el próximo curso 2016-2017 y que “tiene totalmente en cuenta las mejoras que demandan los profesores”.”El interés de estos nuevos programas es que van a garantizar un aprendizaje sólido de los alumnos”, ha explicado la ministra.
Esto se conseguiría mediante un dictado, ejercicios de cálculo mental y lecturas que serán obligatorias a diario en la Escuela Elemental, que corresponde a la Educación Primaria en España (de seis a 12 años). La ministra cree que hay que practicar “una pedagogía de entrenamiento cotidiano y repetición para consolidar los saberes más simples antes de desarrollar los más complejos”. La prioridad para la ministra es el “dominio de la lengua francesa”, por lo que va a doblar el número de horas semanales que la enseñanza primaria dedica a Lengua, actualmente fijado en 10 horas. Vallaud-Belkacem ha anunciado también que por primera vez los programas escolares se pensarán como un todo, y serán “revisados todos juntos” de forma que pueda crearse un programa educativo “progresivo”.
La intención de la medida es evitar que ciertos contenidos se aborden demasiado temprano. Actualmente, en un colegio público francés, los niños empiezan a leer y a hacer cálculos matemáticos a partir de los seis años.El nuevo programa de la ministra revisará también la enseñanza de Historia, con un programa común obligatorio, ya que actualmente presentaba secciones obligatorias y otras optativas. Un ejemplo que explica en su tribuna: los alumnos de Cinquième (el equivalente a Primero de la ESO), estudiarán un tema que se llamará “Cristianismo e Islam, dos mundos en contacto”. Las pautas de la enseñanza laica, sin embargo, no se verán alteradas, al contrario, serán igualmente reforzadas.