El psiquiatra habló en la 99.9 acerca del efecto que tienen tanto la cocaína como el whisky en el cuerpo humano y más aún en combinación; luego de las declaraciones del presidente colombiano Gustavo Petro.
Ante la comparación del presidente de Colombia, Gustavo Petro, entre la cocaína y el whisky, indicando que la droga no es mucho más dañiña que esa bebida, hay aspectos técnicos del impacto de una y otra adicción que vale la pena destacar.
El Dr. Francisco Bordón, psiquiatra, se refirió en la 99.9 a lo que cada cosa le hace al cuerpo y más aún, ambas en combinación: “el whisky es una bebida blanca de altísima graduación, de 45 grados más o menos. El alcohol significa que el 45% es alcohol etílico puro. Obviamente que si uno compara la acción del alcohol etílico a altas dosis, es eventualmente mortal, por supuesto y nadie desconoce el peligro del alcohol al volante y todo eso, que por supuesto existe. Ahora, lo que sucede habitualmente es que quien consume cocaína también consume alcohol. Es una dupla muy típica: subo con la cocaína, bajo con el alcohol. Esto forma algo en el hígado que se llama coquetileno, que es una neodroga producida, resintetizada en el hígado, que también tiene su propia acción adictiva y que produce una neurotoxicidad aún mayor que cualquiera de estas dos sustancias por separado. Desconocer el efecto nocivo, adictivo que tiene la cocaína, compararla con el alcohol no tiene absolutamente nada que ver con la realidad”.
Lo más grave de la situación en Argentina es que no hay un esquema que pueda brindar contención desde el estado y eso genera que el efecto se propague: “hay una huida de todo el sistema de salud. Está avasallado. No se le puede ofrecer casi nada o muy poco a la sociedad para ayudarle en este sentido y por supuesto que tiene que haber políticas públicas. La seguridad para proteger a los inocentes y castigar a los bandidos, eso es otro tema del cual obviamente yo no me meto porque no es un tema mío, pero desde el punto de vista sanitario, es poco y nada lo que se ofrece”.