El incidente ocurrió en la ciudad de Aqaba, luego de que una grúa dejase caer un contenedor con gas licuado en pleno puerto.
Al menos 13 personas murieron el lunes en Jordania y 251 resultaron heridas luego de que se volteara y cayera un contenedor lleno de gas tóxico en el puerto de Aqaba -al sur del país de Medio Oriente-, según pudo conocer The Guardian. En redes sociales, también circularon videos sobre el accidente.
“Una fuga de cloro ocurrió a las 15 (hora de Jordania) en el puerto de Aqaba tras la caída de un contenedor con gas líquido, causando la muerte de 13 personas y 251 heridos jordanos y extranjeros”, declaró el gobierno en un comunicado. El anterior balance oficial era de 10 muertos y más de 200 heridos.
Según las imágenes divulgadas, la grúa que movilizaba el contenedor lo dejó caer sobre el barco. Tras el impacto, una humareda amarilla se escapó de inmediato, mientras la gente trataba de huir. El Primer ministro jordano, Bicher Al-Khasawneh se dirigió al lugar momentos después del incidente.
El adjunto del jefe de la Autoridad portuaria en la región d Aqaba, Haj Hassan, declaró al medio de televisión Al-Mamlaka que una “cuerda de hierro que cargaba un contenedor que llevaba una substancia tóxica se rompió, lo que causó la caída y la fuga de esa misma substancia tóxica.
Asimismo, un exjefe de la empresa que opera el puerto, Mohammed al-Mubaidin, añadió que disponían de al menos 20 depósitos de gas licuado “que contenían un porcentaje muy alto de cloro”. Aseguró que “el gas era pesado y “no es fácil que sus nubes de gas se muevan… ya que se concentra solo en un área”.
El cloro es un desinfectante y un agente de purificación de agua ampliamente utilizado, pero si se inhala, el gas se convierte en ácido clorhídrico, lo que puede provocar quemaduras internas y ahogamiento a través de una liberación reactiva de agua en los pulmones.
La playa del sur de Aqaba debió ser evacuada y los heridos trasladados a dos hospitales públicos, un centro privado y una tienda sanitaria de campaña. Los medios locales mostraron a miembros de las fuerzas de defensa civil y médicos corriendo al lugar de la fuga con máscaras.
El director de salud de la ciudad declaró que “los hospitales de Aqaba estaban saturados y no podían ya recibir más heridos”, algunos en estado crítico. Junto a ello, desde el Ministerio de Salud señalaron que esperaban que solo un puñado de personas permaneciera en instalaciones hospitalarias.
Dentro el puerto -que es uno de los más importantes en el Mar Rojo, los silos de granos fueron puestos bajo inspección de sus granos y detectar cualquier signo de contaminación. Aun así, el tráfico marítimo continúa. Solo se le pidió a los residentes cercanos cerrar ventanas y permanecer en sus casas.