Un terremoto en el océano Pacífico de magnitud 7 sacudió El Salvador y Nicaragua este jueves, sin que se hayan reportado daños materiales.
El sismo se produjo a las 12:43 hora local (18:43 GMT) y tuvo su epicentro a alrededor de 149 kilómetros de Puerto Triunfo, en la costa de El Salvador.
Una alerta de tsunami se emitió como medida de precaución, pero el Centro de Tsunamis del Pacífico retiró su advertencia de oleaje peligroso unas horas después.
El sismo se pudo sentir también con intensidad “ligera” en San Salvador y León (Nicaragua), y “débil” en Ciudad de Guatemala, Managua y Tegucigalpa.
En la capital de El Salvador, San Salvador, se sintió con fuerza el movimiento telúrico y fueron desalojadas viviendas, oficinas y restaurantes, ante el temor a que los edificios se vinieran abajo.
Las autoridades salvadoreñas reportaron 5 réplicas del terremoto, con magnitudes de entre 4 y 5 en la escala de Richter.
El centro fue registrado a una profundidad de 10 kilómetros, según la última revisión del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés).
El temblor inicialmente fue reportado de magnitud 7,2 y con centro a 33 km de profundidad.
Este terremoto sucede después de que el poderoso huracán Otto golpeara la costa caribeña de Nicaragua con vientos de 175 km por hora.
Una fallecida por la falsa alerta
En Nicaragua, una mujer murió de un infarto tras escuchar las sirenas de una alerta de tsunami anunciada por el terremoto de magnitud 7,2 que sacudió este jueves el Pacífico, con epicentro en El Salvador, informaron las autoridades.
La víctima fue identificada como Juana Petrona García, de 57 años, originaria del municipio de San Juan del Sur, cerca de la frontera con Costa Rica, en el Pacífico sur de Nicaragua, dijo la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo.
Las autoridades nicaragüenses suspendieron la alerta de tsunami horas después y procedieron a la desmovilización en las comunidades costeras del Pacífico donde se había activado la alerta.
Nicaragua se encuentra actualmente bajo emergencia nacional por el paso del huracán Otto de categoría 2, que obligó la evacuación de miles de personas y que coincidió con el terremoto de magnitud 7,2, y posterior alerta de tsunami.