Nuevas restricciones al sector en China con el objetivo de luchar contra la adicción de los jóvenes a videojuegos y celulares.
China anunció el viernes (22.12.2023) un plan para imponer nuevas restricciones a la industria de los juegos en línea, con el objetivo de luchar contra la adicción. La noticia ha sacudido al sector tecnológico y varios gigantes han registrado caídas en bolsa con pérdidas millonarias.
Entre los inversores y el índice Hang Seng, que mide las fluctuaciones de las mayores empresas que cotizan en la bolsa de Hong Kong, el anuncio ha generado nerviosismo, con un desplome de más del 4 por ciento durante la sesión, aunque las pérdidas se moderaron a un 1,7 por ciento al cierre.
La cotización de Tencent –líder mundial de este sector en términos de ingresos– cayó un 12,4 por ciento al cierre de la bolsa de Hong Kong, aunque los títulos llegaron a desplomarse un 15 por ciento durante la sesión. El anuncio generó una pérdida de la capitalización bursátil de más de 54.000 millones de dólares, según la agencia Bloomberg News. Por su parte, la compañía NetEase cerró con una caída de 25 por ciento y las acciones de XD perdieron un 19 por ciento de su valor.
Combatir comportamientos compulsivos
El borrador, publicado en internet por el regulador chino, busca limitar las compras que un jugador puede hacer para mejorar su desempeño y está orientado a combatir los comportamientos compulsivos en un país que es el mayor mercado mundial de este sector.
En 2021, China impuso las primeras restricciones al sector de los videojuegos, estableciendo límites en el tiempo que los menores pueden pasar en un juego en línea. La medida se produjo en el marco de una campaña más amplia para regular a los gigantes tecnológicos.
El plan que acaba de anunciarse ahora impone límites a las recargas que un usuario puede hacer en la cartera de un juego, suprime funciones orientadas a aumentar el tiempo de uso de una aplicación y las recompensas a quienes se conectan a diario. Además, las autoridades quieren obligar a introducir ventanas emergentes que adviertan a los usuarios sobre los comportamientos “irracionales”.
El borrador reitera además la prohibición de contenidos que pongan “en peligro la unidad nacional” y que sean una amenaza para “la seguridad nacional o que perjudiquen la reputación y los intereses nacionales”.