La oferta del gigante de internet se había realizado en noviembre, pero los cientos de millones de socios de la firma de Wearables recién aceptaron el acuerdo en los primeros días de año nuevo.
El 80,4% de los accionistas del fabricante de smartwatch y wearables votaron a favor de la operación de compra por parte del gigante tecnológico en una junta extraordinaria celebrada durante los primeros días del año.
La operación alcanzará u$s 2100 millones. El acuerdo obtuvo 415,2 millones de votos a favor, un millón en contra y 1,1 millón de abstenciones. Los socios de Fitbit, asimismo, validaron el plan de absorción presentado por la compañía en noviembre de 2019, cuando Google hizo su oferta.
Google ofreció u$s 7,35 por acción, un 26% más respecto a la cotización del fabricante antes de que trascendiera su interés en ella. A falta de conocer los resultados del ejercicio fiscal del año 2019, Fitbit cerró los nueve primeros meses del año con una facturación de u$s 932,6 millones, una caída del 0,8% interanual. Las pérdidas, que en el primer semestre se habían recortado, volvieron a aumentar hasta u$s 100,5 millones. Las acciones de Fitbit saltaron un 17% al confirmarse la noticia.
La adquisición es la segunda compra más importante de Google este año, después de que acordó pagar u$s 2600 millones en junio por el proveedor de software en la nube Looker.
El acuerdo seguramente atraerá el escrutinio regulatorio. Las autoridades estatales y federales están investigando a Google por posibles prácticas anticompetitivas relacionadas con cómo maneja los datos del consumidor y cómo opera en el mercado de publicidad digital.
Aunque Google no es un líder en el negocio de los relojes inteligentes o rastreadores de actividad física, los reguladores en los EE.UU. y en otras regiones probablemente realizarán averiguaciones en torno a lo que Google pretende hacer con los datos que los usuarios de Fitbit han compartido a lo largo de los años, incluida la información de salud íntima y ubicación.
Google tiene un ecosistema creciente de smartphones y computadoras portátiles, y proporciona un sistema operativo portátil gratuito llamado Wear OS para que otras empresas lo usen, pero aún no ha construido su propio reloj.
Comprar Fitbit le da a Google una nueva plataforma con acceso a los más de 27 millones de usuarios activos de la compañía. Google también podría combinar el software de Fitbit con la tecnología de reloj inteligente que le compró por u$s 40 millones a Fossil Group Inc. a principios de este año para ayudarla a diseñar nuevos productos.