El diputado por esa provincia habló en la 99.9 de una situación sumamente preocupante: “es 12 de marzo y todavía en Chubut no se terminaron de pagar los sueldos de enero”. Además, habló sobre la publicación de OPI Santa Cruz que habla sobre la llegada de 800 chinos para trabajar en la construcción de represas.
La información publicada por OPI Santa Cruz no deja de ser sorpresiva: tras los despidos de trabajadores argentinos en las Represas, 800 chinos están listos para llegar al país e incorporarse a la UTE.
Este tema fue abordado en la 99.9 por el diputado por Chubut, Gustavo Menna quien señaló que “la mano de obra intensiva es la de los contratistas y tendremos que buscar precisiones al respecto. Santa Cruz siempre tuvo la particularidad de ser renuente a que trabajen personas de otras provincias. Tienen una ley provincial incluso, que se aplica más que nada al petróleo que le impone a las escuelas contratistas petroleras a tener un porcentaje de trabajadores santacruceños”.
Lo sospechoso del caso es que provengan además desde China en medio de este brote de coronavirus que mantiene en vilo al planeta, pero además, hay otras implicaciones que se deberán analizar: “entiendo que debe haber estipulaciones en los pliegos sobre la contratación de personal porque son obras millonarias. Esto tiene implicancias geopolíticas porque depende también del gobierno nacional”, explicó.
La situación en el sur del país sigue siendo preocupante, pero ya no sólo en Santa Cruz, sino también en su propia provincia: “es 12 de marzo y todavía en Chubut no se terminaron de pagar los sueldos de enero. Hay empleados públicos que la última vez que recibieron dinero fue hace dos meses en una provincia muy rica desde lo productivo por las distintas áreas que se pueden trabajar”.
La peor pesadilla de los chubutenses se ha transformado en una realidad y no parece haber gente a la cuál le importe demasiado: “hay una provincia paralizada, sin servicios públicos donde los chicos en su mayoría no empezaron las clases. Estas historias siempre se daban en Santa Cruz y ahora estamos peor que Santa Cruz”.