Pablo Garcilazo es un vecino de la ciudad que encabeza el reclamo de un grupo de personas de la zona de Colón al 10.000. Le han pedido a OSSE que tape un pozo cloacal y no encuentran respuesta: “se ha juntado mucha agua podrida y está saliendo directamente a la calle. Está lleno de olor a podrido y agua”, afirmó en la 99.9.
A veces seguir las vías legales y normales para un reclamo no alcanzan para que se cumpla con un pedido. Los vecinos de la Avenida Colón al 10.000 están lidiando con un intento por que OSSE les brinde una respuesta y no hacen más que chocar una y otra vez, sin lograr que se resuelva.
Esta mañana, habló al respecto Pablo Garcilazo, quien explicó en la 99.9 que “hace casi 7 meses que, primero en forma individual y luego de forma colectiva, estamos haciendo un reclamo para que vengan a limpiar un pozo cloacal con basura, le pongan la tapa y lo sellen”.
Todo se dio cuando inexplicablemente se robaron las tapas de los pozos que son de cemento en septiembre del año pasado y desde entonces, están tratando de arreglar el problema: “hicimos el requerimiento a OSSE, pusieron la tapa pero quedó sin sellar. Vino el EMVIAL a hacer unas obras y corrieron la tapa. A partir de ahí se metió mucha basura dentro del pozo. Llamamos nuevamente a OSSE para que limpien y sellen esa tapa, pero no lo hicieron nunca”, remarcó.
Hoy se encuentran afectados por algo que se podría haber evitado de una forma incluso muy sencilla: “se ha juntado mucha agua podrida y está saliendo directamente a la calle. Está lleno de olor a podrido y agua”.
Como no podían llegar a la solución requerida, fueron a buscar ayuda a otro sector, pero tampoco tuvieron fortuna: “hicimos una denuncia en Defensoría del Pueblo, pero nos cansamos y ya nos enojamos. Nos han llamado en varias oportunidades desde la empresa diciendo que el trabajo se hizo y el pozo sigue igual hace 7 meses”, contó Pablo.
La única justificación razonable que encuentra el vecino tiene que ver con ser parte de un barrio periférico en la ciudad de Mar del Plata, un flagelo que tienen muchos de los ciudadanos y habla de un modelo de gestión pública: “es el problema histórico de Mar del Plata entre el centro y la periferia. Estamos en Colón al 10.000 y nos preocupa porque las vías formales las hicimos, hablamos de buena manera; pero nos cansamos”, finalizó.