La cifra surge de la comparación con el año 2010 e indica que el mayor incremento se ha dado en África y Asia. Así lo afirma el nuevo Anuario Pontificio vaticano.
En el mundo hay 1.214 millones de bautizados católicos, según las últimas estadísticas publicadas ayer en el nuevo Anuario Pontificio Vaticano, con un crecimiento del 1,5% respecto al 2010. Los números revelan que cambian los equilibrios internos en la Iglesia debido a su decadencia en Europa, donde reside el 23,5% de los bautizados. En el continente americano reside prácticamente la mitad de la población católica: el 48%.
Pero mientras en América el crecimiento de los católicos es bajo, coincide con el 0,3% de incremento de los habitantes, y se acentúa el cambio de centro de gravedad con un aumento del 4,3% en África y Asia. África es el continente más dinámico en todos los sectores del catolicismo. Los bautizados subieron más que la población, que fue del 2,3%. Lo mismo en Asia, de casi el 1%.
Entre los dos continentes donde el catolicismo muestra una mejor dinámica, el total de bautizados llega al 16% en África y al 10,9% en Asia, en constante subida. Estos datos explican que también haya crecido el número de sacerdotes asiáticos y africanos, pasando en un decenio de 405 mil a 413 mil, tras décadas en que disminuía el número de curas. La dinámica es muestra un incremento del 39,5% en África y del 32% en Asia. El saldo fue de tres mil sacerdotes más en ambos continentes solo en 2011. América conservó el dato estacionario de 122 mil curas, mientras que Europa, en neta contratendencia respecto a la media mundial, registró entre 2001 y 2011 una disminución apenas inferior al 10%.
En los seminarios, en el mismo decenio los candidatos al sacerdocio diocesano o en las órdenes religiosas creció un 7,5%, pasando de 112 mil a 120 mil. Están llenos los seminarios en África (+31%) y en Asia (+29,4%). Situación que contrasta con la contracción del 21,7% en Europa. En el continente americano, el saldo es negativo en casi el 2%.
Europa ha dejado de ser el continente motor del catolicismo, que abastecía de miles de misioneros. Su participación descendió del 23% a casi el 17%.
El dato más impresionante es el de las órdenes religiosas femeninas, que en las últimas décadas del siglo XX registraban un continuo crecimiento de las vocaciones. La tendencia actual es de un fuerte decrecimiento, con una pérdida del 10% en la década 2001-2011. Sobre un total de 792 mil, el número de monjas descendió a 713 mil. Los números no son aun menores gracias al sostenido empuje en África (+28%) y Asia (18%).