El periodista riojano Omar Barberis dio a conocer que César Milani integraba el Batallón 601 de Inteligencia en la última dictadura militar. Esta mañana en la 99.9, habló sobre el silencio de sus colegas en la provincia. “Hay como un cono de silencio sobre varias cosas”, agregó.
El caso de César Milani no deja de sorprender a propios y extraños. Después de semanas de debate y opiniones sobre su persona, todo sigue en el mismo punto. A pesar de los datos que se han aportado desde que se anunció que sería ascendido al máximo cargo militar, no se aceptan los errores.
Esta mañana en la 99.9, el periodista riojano Omar Barberis siguió aportando detalles que sirven para comprender el contexto del tema. En principio, se mostró anonadado por la falta de reacción en su propia provincia: “hay medios de La Rioja que venían muy jugados con las causas de Derechos Humanos e incluso con las madres de Plaza de Mayo de La Rioja, que son dos. Veo un silencio que me deja mal. Que no te den bolilla con lo que vos publicás está bien, pero que no pase nada acá en La Rioja es muy raro”.
Si bien ya develó datos importantes para saber qué lugar ocupaba Milani en la dictadura militar, hay más información que aún no es conocida públicamente y Barberis tiene en su poder: “hay como una especie de cono de silencio sobre varias cosas. Nadie se había percatado de que Milani pertenecía al Batallón 601 de Inteligencia. Solo utilicé la tapa de Veintitrés, pero no utilicé la copia que firma Milani y donde están los 4.800 y pico de integrantes del batallón por orden alfabético y con número de documentos. Él firma el documento pero se borra de la lista”, remarcó. Estos datos no son secretos, sino que el propio periodista aclaró que son públicos: “todo esto está abierto para la gente, no es una locura mía”.
Lo peor de toda esta cuestión es que aparecen personajes que hablan despectivamente de personalidades que han luchado durante años por los Derechos Humanos. “Graciela Fernández Meijide es la mamá de un desaparecido; con eso, para mí, basta para darle una entidad que los demás no tenemos. Cuando se armó la Comisión por la Memoria en Provincia de Buenos Aires, había gente muy respetable. No podemos cuestionar a Adolfo Pérez Esquivel a esta altura de la vida”, reclamó en la 99.9. Pero los límites se desdibujan con mucha facilidad ante las palabras de imprudentes: “algunos hablan porque descubrieron la causa de los Derechos Humanos porque es un tranvía que los lleva bien a todos lados. Escucho gente que ha llegado a poner en duda la verdadera desaparición de Alberto Ledo. Hay que ser muy hijo de puta para decir eso”, sentenció Omar Barberis.
En ese contexto, volvió a reclamar que se publique toda la información sobre Milani y no algunas cosas solamente, como lo ha hecho el CELS: “a mí me hiela la sangre que nos afanen la primera foja del legajo de Milani. Lo que distribuyó el CELS es una página y arranca el 16 de octubre del 76; el período que nos interesa va de febrero hasta junio. La parte más crítica y complicada no fue entregada”. El tema está lejos de terminarse. Pero ya se han puesto en discusión otros puntos de la historia que no están en tela de juicio. “Acá no hay desaparecidos buenos y desaparecidos malos, son todos desaparecidos”, finalizó el periodista.