Helsinki: cero muertes por accidentes de tráfico

Helsinki, la capital finlandesa, pasó un año entero sin ninguna muerte por accidentes de tráfico. La planificación basada en datos fue de gran ayuda.

Cero: ese es el número de personas fallecidas en accidentes de tráfico en la capital de Finlandia, Helsinki, en los últimos 12 meses.

Otras ciudades han logrado esta hazaña, como la capital noruega, Oslo, en 2019. Sin embargo, Helsinki, con casi 690.000 habitantes, se encuentra entre las ciudades más grandes en lograrlo. Su accidente de tráfico más reciente ocurrió en julio de 2024.

El número de víctimas mortales en la capital finlandesa ha sido sustancialmente menor que el de otras capitales europeas, tanto en términos absolutos como por habitante.

En esa ciudad se registraron cuatro muertes por accidente de tráfico en 2024, con una tasa de 0,59 por cada 100.000 habitantes hasta principios de julio. En comparación, Berlín registró 1,45 por cada 100.000 habitantes, y Londres, 110.

Según Roni Utriainen, ingeniero de tráfico y planificador de carreteras del Ayuntamiento de Helsinki, varias razones contribuyeron a dicho éxito. La primera es la reducción del límite de velocidad a 30 kilómetros por hora en más de la mitad de las calles de la ciudad y en los alrededores de las escuelas.

Cero muertes por accidentes de tráfico hasta 2050
El logro de Helsinki va de la mano con el programa Visión Cero de la Unión Europea, cuyo objetivo es acercarse lo más posible a que no haya ninguna muerte en la carretera hasta 2050.

Para alcanzar este objetivo, la administración municipal de Helsinki puso en marcha el Programa de Desarrollo de la Seguridad Vial para que las calles de la ciudad sean más seguras y socialmente responsables.

La capital quiere identificar las rutas más importantes para la seguridad infantil, peatonal y ciclista, y reconstruir su infraestructura. Esto implica la reconstrucción de ciclovías y el alumbrado público, la mejora de las directrices y la creación de redes con otras ciudades e instituciones.

Según Utriainen, también es una prioridad aumentar el uso del transporte público.

Datos para prevenir accidentes
Helsinki recopiló datos sobre accidentes y velocidad de conducción, y consultó a los residentes con el fin de identificar tramos peligrosos o puntos críticos.

Hagen Schüller, planificador de tráfico e ingeniero de PTV Transport Consult en Berlín, afirmó que considerar múltiples y variados tipos datos es importante a la hora de realizar la planificación del tráfico moderno, y que «hay que tener en cuenta muchos factores. Eso hace que la seguridad vial sea muy compleja».

En la mayoría de las grandes ciudades existen centros de control de tráfico donde se monitoriza el tráfico de toda la ciudad con sensores, cámaras y detectores. «No se pueden controlar todos los factores, como el mal tiempo, pero eliminar uno crea una barrera y evita accidentes», explicó.

«El control de la velocidad es una medida importante para abordar la velocidad real de conducción», declaró Utriainen a DW. «La Policía es responsable del control de la velocidad en Finlandia, pero la ciudad es responsable de construir puntos de control fijos, operados por la Policía», añadió.

Más innovación, pero también más implementación
Schüller cree que el futuro de la gestión del tráfico podría ser automatizado y estar impulsado por la IA. La automatización, aún en desarrollo, surgirá junto con los vehículos autónomos. De aprobarse su uso, estos vehículos enviarían datos de velocidad y ubicación a los centros de control de tráfico, que, a su vez, devolverían información, como los límites de velocidad.

La inteligencia artificial, afirmó Schüller, podría utilizarse para analizar imágenes de cámaras de tráfico y controlar el tráfico automáticamente. El ingeniero está convencido de que Visión Cero es posible y considera que los esfuerzos de Helsinki son un modelo para las ciudades medianas.

«La mayoría de las ciudades que lograron cero muertes son más pequeñas, mucho más pequeñas. La atención que Helsinki recibe por ello está justificada», afirmó.

Los debates sobre la destrucción de plazas de aparcamiento para construir ciclocarriles, la reducción de los límites de velocidad, o la creación de zonas sin coches son también un tema cotidiano en muchas ciudades alemanas. El conocimiento y la tecnología ya están disponibles, afirmó Schüller.