Es una enfermedad que afecta muchos animales, y también a medio millón de personas en todo el mundo.
Mediante el empleo de tecnologías de última generación, investigadores del Instituto Leloir, en colaboración con otras instituciones, lograron por primera vez identificar la totalidad de genes que se activan o se reprimen (otorgándole más o menos virulencia) a la bacteria de la brucelosis, una patología del ganado y otros animales domésticos que también afecta anualmente a medio millón de personas en el mundo (incluyendo a 10.000 argentinos).
El hallazgo “podría servir para diseñar en el futuro nuevas vacunas y desarrollar fármacos antibacterianos” contra la enfermedad, explicó la doctora Ángeles Zorreguieta, jefa del Laboratorio de Microbiología Molecular y Celular del Instituto de Investigaciones Bioquímicas de Buenos Aires (IIBBA).
Para animales de consumo como el ganado bovino, en el que la enfermedad produce pérdidas millonarias, existen vacunas con distintos grados de eficacia protectora. Sin embargo, aún no existen fórmulas para prevenir la brucelosis humana que, en ausencia de tratamiento, puede llegar a manifestaciones clínicas potencialmente fatales, como endocarditis y meningitis.
El trabajo fue publicado recientemente en la revista “Nucleic Acids Research” y sienta bases para el desarrollo futuro de vacunas y fármacos contra esa enfermedad.