Ignacio Kovarsky: «La presión impositiva en algún momento tiene que llegar a su fin»

El presidente de CARBAP habló en la 99.9 sobre la exposición que hicieron en la Cámara de Diputados acerca del impacto de las tasas municipales para la actividad.

El campo volvió a insistir en la provincia de Buenos Aires con el impacto de las tasas municipales en la actividad diaria para el sector y lo hizo ante la Cámara de Diputados de la provincia recientemente.

El presidente de CARBAP, Ignacio Kovarsky, habló en la 99.9 al respecto y señaló que «tenemos un trabajo hecho ya desde comienzo de año respecto de las tasas, el impacto que tiene la producción, cuántos kilos más de producto tenemos que pagar y que vender para pagarlo, los aumentos respecto del año anterior…un montón de análisis objetivo sobre el peso de las tasas. Esto tuvo mucha repercusión y desde la legislatura nos pidieron que vayamos a contarlo, mostrarlo, más allá de que, por supuesto, el ámbito de esta discusión es municipal. Tuvimos una buena reunión, había diputados y senadores de todos los partidos políticos, se mostraron muy interesados y claramente con ganas de ver qué pueden hacer, acompañando a sus intendentes, quiénes son los que de alguna manera responden, pero también a los contribuyentes, porque entienden que el ahogo que hay de pagar y pagar y pagar y pagar, en algún momento tiene que llegar a fin».

La situación en los municipios entienden que ha cambiado desde que Javier Milei llegó a la presidencia y están en pleno ajuste, pero la presión impositiva debe parar según lo que opina el sector: «quizás no todos los municipios son deficitarios, pero sí tienen un equilibrio, tenían un equilibrio muy finito y hoy, cuando se terminaron las coparticipaciones discrecionales, cuando hoy la plata no se imprime y se manda anualmente, todo se empiezan a ajustar. Municipios que tienen desorden, donde capaz que la masa salarial por la cantidad de empleados que tienen es más del 75 % del presupuesto mensual, empiezan a tener problemas hasta para pagar sueldos y ahí también hay un temón, porque parte de la discusión es el uso de la tasa vial. Y sabemos que muchísimos municipios usan la tasa vial para pagar sueldos. Incluso hoy la totalidad de la tasa vial va para pagar sueldos y nada se hace en caminos».

Dentro del contexto económico que está viviendo el sector agropecuario, Kovarsky también expresó la mirada de la entidad que preside respecto del trato del gobierno hacia el campo. «Respecto de las políticas agropecuarias, hay cosas que se han hecho, por supuesto, como estar tranquilos de que no nos van a cerrar las exportaciones, que no tenemos que sacar todos esos permisos discrecionales que había, donde no hay hasta un dedo acusador que nos diga que somos un sector contra la sociedad. Esta gestión nacional nos ha valorado de manera muy distinta. Sí es cierto que hay mucha deuda para concretar esto. Es tanto baja de retenciones como algunos otros temas que tenemos respecto de seguir desburocratizando, ya en una etapa mucho más que tiene que ver con bisturí, no con motosierra en algunos organismos. Pero es una administración que viene a ordenar un poco y a tratar de alguna manera de equilibrar cuentas que nunca se habían creado en Argentina», indicó.

Como en otros tiempos, el reclamo sigue siendo por un mayor protagonismo de la actividad para generar los recursos que también necesita el país, pero siempre centrados en bajar la carga impositiva: «el protagonismo del campo tiene que ser mucho más que el que tenemos hoy. Nosotros entendemos que somos una oportunidad para generar tanto producción como empleo, pero con las condiciones de competitividad de hoy es imposible. Con esta política económica de tipo de cambio, y con los precios que tenemos y con el clima que tenemos y la presión impositiva, es imposible. Queremos dar competitividad a cualquier persona que produce en la Argentina. Hay que bajar impuestos, trabajamos sobre eso, insistimos sobre eso. Por supuesto, todos sabemos que el 30 de junio lo que nos ha hecho la resolución y que sigue insistiendo el presidente con todos sus funcionarios, es que todas las retenciones vuelven al estado anterior, al del año pasado, menos trigo y soja, que quedarían en 1,5; algo que tiene sabor a poco. Nosotros entendemos que tenían que ser cero retenciones y y tenemos que estar hablando sobre el resto de los cultivos».