El fiscal Di Lello impulsó la investigación por el contrato irregular celebrado entre la cooperativa que presidía Ofelia Wilhelm, el Correo Argentino y ARBA. Un caso que podría llegar hasta Franco Macri, padre del Presidente.
La madre de Cristina Kirchner, Ofelia Wilhelm, quedó imputada ayer en la causa que investiga “la simulación de una relación contractual entre una cooperativa que no opera como tal, el Correo Argentino y la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA) con el consecuente desvío de fondos en detrimento del Correo Argentino por al menos diez años”.
El fiscal federal Jorge Di Lello imputó a Wilhelm y a Fotios Cunturis, responsables de la cooperativa El Aldabón, y a “los directivos y/o funcionarios del Correo Argentino que tuvieron participación en la celebración de los diferentes convenios entre la mencionada cooperativa y el órgano estatal”.
La cooperativa debía prestar al correo el servicio conocido como “finishing” de los envíos de ARBA, consistente en el “empaquetado, preparación y repartición de la correspondencia”.
Las irregularidades
La denuncia que investiga Di Lello fue impulsada por la diputada Elisa Carrió, quien sostuvo que “el valor del convenio citado sería de aproximadamente 61 millones de pesos tan solo en cinco de los diez años de duración del contrato (entre 2011 y 2015), cobrando relevancia que la cooperativa no estaba registrada como prestador oficial de correo y por tanto el Correo Argentino no podía subcontratarla”.
Además, según la acusación de Carrió que Di Lello refleja en su dictamen, la resolución 360/75 del INAC (actual Inaes, Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social) prohíbe expresamente a las cooperativas de trabajo la tercerización por períodos tan prolongados ya que se podría estar simulando la figura cooperativista como un mecanismo de evasión impositiva.
La denuncia de la líder de la CC-ARI apuntaba a que “luego de la estatización del Correo Argentino se habría celebrado el convenio con El Aldabón Ltda. que implicaría una cuota de repartición de correspondencia, dado que el correo subcontrataba a la cooperativa”.
Cuestión de tiempos
Según la denuncia, El Aldabón se constituyó en 1994 con un artilugio para que empleados de la ex- Dirección Provincial de Rentas (hoy ARBA) pudieran repartir boletas de organismos en horas libres y “hacer un extra”.
El caso habría sido investigado por el fiscal Carlos Stornelli luego de que le llamara la atención que la cooperativa, “sin licencia de operador postal, reclamara este año un pago de 61 millones y haya tenido el año pasado un nuevo contrato aprobado por 147 millones de pesos”.
Ante esto, el fiscal solicitó copia de los convenios firmados entre la cooperativa y el correo, así como la nómina de directores y autoridades en atención “a la discrepancia en cuanto a la época en que se firmó”.
Di Lello le pidió, además, a la diputada Carrió detalles de la investigación realizada por su cuerpo de asesores que devino en la denuncia, y al fiscal Carlos Stornelli que precise si se encuentra investigando estos hechos.
Sorpresa: Franco Macri, salpicado
“El convenio lo habíamos firmado con el grupo Macri (Socma) en 1994”, afirmó Cunturis, el titular de la cooperativa, en declaraciones periodísticas, y agregó que “nunca se interrumpió” hasta 2011. El socio de Ofelia Wilhelm admitió, además, que la madre de la expresidenta, hoy de 87 años, actuaba como síndica suplente de la entidad, constituida por jubilados.
Atenta a esto, la requisitoria del fiscal solicita a la Inspección General de Justicia el envío de legajos correspondientes a la empresa Socma para verificar en qué época se firmó el convenio.
El grupo Socma se hizo cargo del correo en 1997 hasta que fue reestatizado en 2003, luego de que entrara en convocatoria de acreedores.
Datos de la causa
– LA COOPERATIVA: Ofelia Wilhelm y Fotios Cunturis son los responsables de El Aldabón.
– LOS CONTRATOS: el Aldabón firmó convenios con el Correo Argentino para repartir la correspondencia de ARBA.
– LA INVESTIGACIÓN: se indaga “la simulación de una relación contractual entre una cooperativa, el Correo y ARBA”.
– $61 MILLONES: habría cobrado la cooperativa entre 2011 y 2015.
– 10 AÑOS: es, como mínimo, el tiempo durante el cual el Correo Argentino desvió fondos para El Aldabón.
La verdad sobre Ofelia Wilhelm, la cooperativa y los vínculos con el IOMA
En los últimos días, algunos medios nacionales se han dedicado a informar sobre la historia de la madre de la expresidenta Cristina Kirchner con la cooperativa El Aldabón, dedicada a la distribución de correspondencia en el Estado bonaerense. También hicieron referencia a los presuntos beneficios que se le dieron a Ofelia Wilhelm desde el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA) durante el gobierno de Daniel Scioli.
La realidad es que el tema no es nuevo. El diario Hoy lo viene denunciando desde hace años, a punto tal que en reiteradas ocasiones ha alertado sobre la incompatibilidad manifiesta que significa la existencia de un gremio que, dentro del Estado, esté de los dos lados del mostrador. Es decir: es patronal y a la vez representa a los trabajadores. Por eso se llegó al extremo de que, durante una negociación paritaria, el titular de la cooperativa El Aldabón, que a su vez era secretario general de la Federación de Gremios Estatales y extitular del sindicato AERI, Fotios Cunturis, planteó como principal prioridad la necesidad de que el gobierno bonaerense cancelara una deuda que mantenía con la cooperativa que él mismo presidía.
Asimismo, el litigio entre el Municipio platense y la cooperativa tampoco es un dato nuevo. Este medio dio cuenta de esta situación el 27 de marzo de 2014, cuando se informó que la Comuna le había iniciado un juicio de apremio a raíz de una abultada deuda en concepto de la tasa de Seguridad e Higiene, que en aquel entonces ascendía a $500.625. En su momento, se le había ofrecido un plan de pago a la cooperativa para cancelar la deuda en 24 cuotas, pero El Aldabón habría incumplido con los compromisos asumidos. El juicio de apremio se tramitó ante el Juzgado Nº 14 en lo Civil y Comercial de nuestra ciudad.
Desde estas páginas también se informó que entre los integrantes de El Aldabón figura Wilhelm, quien antes de jubilarse fue empleada y sindicalista en el Ministerio de Economía bonaerense. En rigor, Ofelia nunca fue secretaria general del gremio AERI, como dijo su hija en la carta publicada en Facebook: solo integró la comisión directiva.
Este diario también reveló que, como integrante de esta cooperativa, en el año 2012 la madre de Cristina participó del acto de inauguración de una biblioteca y sala de lectura en la Escuela Primaria Básica Nº 20 Paraje La Hermosura, ubicada en la Ruta 11, en Berisso. Estuvo acompañada por quien era el intendente de esa localidad, el kirchnerista Enrique Slezack.
El IOMA
En los medios nacionales también se consignó, equivocadamente, que la mamá de CFK no era afiliada del IOMA y que, pese a ello, igual recibió prestaciones de la obra social. Como jubilada de la administración pública bonaerense y beneficiaria del Instituto de Previsión Social, Ofelia es afiliada al Instituto. En todo caso, la irregularidad estuvo dada -como lo informó en exclusiva este diario el 21 de noviembre de 2014- en que el IOMA le reintegró indebidamente $181.807 por una operación de cadera realizada en un sanatorio que no está en la cartilla de la obra social. Auditores médicos afirman que, por una intervención quirúrgica de iguales características, solo se reconoce el 21% de ese valor a otros afiliados
A través de una decisión del directorio, vía trámite de excepción, el IOMA también avaló la compra de una prótesis importada para Ofelia y se fijaron valores que estarían muy por encima de lo que la obra social paga por operaciones similares.
Las diferencias eran notables: mientras que a la madre de la expresidenta le desembolsaron $181.807,86, si otro afiliado hubiese realizado el mismo trámite de excepción, por una operación idéntica, realizada en la misma clínica, casi con seguridad se le hubiese devuelto solo $38.817,88, es decir, el 21,3% de lo asignado a Ofelia.