India aspira a convertirse en el cuarto país en realizar un aterrizaje controlado en la Luna con el lanzamiento de su misión Chandrayaan-3 este viernes.
Chandrayaan, que significa “vehículo lunar” en sánscrito, despegó del Centro Espacial Satish Dhawan de Sriharikota, en el estado meridional de Andhra Pradesh, poco después de las 14:30 hora local (5.00 ET).
Una multitud se congregó en el centro espacial para presenciar el histórico lanzamiento y más de un millón de personas lo siguieron a través de YouTube.
Es el segundo intento de India de realizar un aterrizaje suave, después de que fracasara su anterior esfuerzo con el Chandrayaan-2 en 2019. Su primera sonda lunar, la Chandrayaan-1, orbitó la Luna y luego se estrelló deliberadamente en la superficie lunar en 2008.
Chandrayaan-3, desarrollada por la Organización de Investigación Espacial de la India (ISRO), consta de un módulo de aterrizaje, un módulo de propulsión y un vehículo explorador. Su objetivo es aterrizar con seguridad el 23 de agosto en la superficie lunar, recoger datos y realizar una serie de experimentos científicos para conocer mejor la composición de la Luna.
Solo otros tres países han logrado la complicada hazaña de posar una nave espacial en la superficie lunar: Estados Unidos, Rusia y China.
Los ingenieros indios llevan años trabajando en el lanzamiento. Su objetivo es que Chandrayaan-3 aterrice cerca del difícil terreno del inexplorado Polo Sur de la Luna.
La primera misión lunar india, Chandrayaan-1, descubrió moléculas de agua en la superficie de la Luna. Once años después, la Chandrayaan-2 entró con éxito en órbita lunar, pero su vehículo se estrelló en la superficie. También debía explorar el Polo Sur de la Luna.
En aquel momento, el primer ministro de la India, Narendra Modi, elogió a los ingenieros de la misión a pesar del fracaso y prometió seguir trabajando en el programa espacial y las ambiciones de la India.
Justo antes del lanzamiento de este viernes, Modi dijo que ese día “siempre quedará grabado con letras de oro en lo que respecta al sector espacial indio”.
“Esta notable misión llevará las esperanzas y los sueños de nuestra nación”, afirmó en un mensaje en Twitter.
India ha gastado desde entonces unos US$ 75 millones en su misión Chandrayaan-3.
Modi dijo que el cohete recorrerá más de 300.000 kilómetros y llegará a la Luna en las “próximas semanas”.
La misión a la Luna, un hito tras décadas de trabajo de India
El programa espacial de India se remonta a hace más de seis décadas, cuando era una república recién independizada y un país profundamente pobre que se tambaleaba tras una sangrienta partición.
Cuando lanzó su primer cohete al espacio en 1963, el país no estaba a la altura de las ambiciones de Estados Unidos y la Unión Soviética, que iban muy por delante en la carrera espacial.
En la actualidad, India es la nación más poblada del mundo y su quinta economía. Cuenta con una floreciente población joven y alberga un creciente centro de innovación y tecnología.
Y las ambiciones espaciales de la India se han puesto al día bajo el mandato de Modi.
Para el líder, que llegó al poder en 2014 con un discurso de nacionalismo y grandeza para el futuro, el programa espacial de la India es un símbolo de la creciente prominencia del país en la escena mundial.
En 2014, India se convirtió en la primera nación asiática en llegar a Marte, cuando puso la sonda Mangalyaan en órbita alrededor del planeta rojo por US$ 74 millones, menos de los 100 que Hollywood gastó en hacer el thriller espacial “Gravity”.
Tres años después, India lanzó la cifra récord de 104 satélites en una sola misión.
En 2019, Modi anunció en un inusual discurso televisado que India había derribado uno de sus propios satélites, en lo que afirmó que era una prueba antisatélite, convirtiéndose en uno de los únicos cuatro países en hacerlo.
Ese mismo año, el entonces presidente de la ISRO, Kailasavadivoo Sivan, declaró que India planeaba crear una estación espacial independiente para 2030. En la actualidad, las únicas estaciones espaciales disponibles para tripulaciones de expedición son la Estación Espacial Internacional (un proyecto conjunto de varios países) y la Estación Espacial Tiangong de China.
El rápido desarrollo y la innovación han hecho de la tecnología espacial uno de los sectores más atractivos para los inversores, y los líderes mundiales parecen haberse dado cuenta.
El mes pasado, cuando Modi se reunió en Washington con el presidente Joe Biden, la Casa Blanca declaró que ambos líderes buscaban una mayor colaboración en la economía espacial.
Y las ambiciones espaciales de la India no se detienen en la Luna o Marte. La ISRO también ha propuesto enviar un orbitador a Venus.