El ministro germano de Exteriores condena los hechos: «Estamos todos en el mismo barco».
Los hospitales de Alemania están ocupados solamente al 40% de su capacidad. Pese a la pandemia de coronavirus, las camas UIC con respiradores siguen vacías y por ese motivo varios gobiernos regionales alemanes han decidido aceptar el traslado de pacientes italianos y franceses, cuyas vidas dependen de respiradores que sus propios países no les pueden proporcionar. Sin embargo algunas ciudades fronterizas a las que llegan no les proporcionan una buena acogida.
Algunos franceses han informado a las autoridades de que les habían escupido durante un paseo o en las cajas de los supermercados. Uno de ellos denunció que le habían dicho: «¡Regresa a tu país del corona!». Faltas de respeto a las que ha reaccionado con firmeza el ministro alemán de Exteriores, Heiko Maas. El ministro ha condenado las agresiones y vejaciones recordando que «el coronavirus no conoce nacionalidad ni fronteras». «Es lo mismo para la dignidad humana. Sabe mal ver cómo nuestros amigos franceses son a veces insultados y agredidos a causa del Covid-19. Un comportamiento así no es aceptable. Es necesario que entendamos que estamos todos en el mismo barco», ha tuiteado.
Maas se suma así a las disculpas de la ministra regional de Economía de Sarre, región limítrofe del Gran Este francés, Anke Rehlinger, que ha declarado que «nuestro corazón sangra por las fronteras cerradas con Francia y Luxemburgo. Se dice que los franceses son insultados y que les lanzan huevos. Quienquiera que hace eso peca contr la amistad de nuestros pueblos». «Presento mis disculpas a nuestros amigos franceses por estos incidentes aislados», ha dicho en nombre del pueblo alemán.
También Michael Clivot, alcalde de la pequeña localidad alemana de Gersheim, ha pedido disculpas por el comportamiento de algunos habitantes, al constatar «cierta hostilidad contra nuestros amigos franceses» en su región. «Algunos son insultados y retenidos en la calle», ha lamentado en un mensaje en vídeo difundido por Facebook en el que pide a la población que no pierda su humanidad durante esta crisis. Clivot ha criticado, además, el cierre de la frontera con Francia por parte de las autoridades alemanas, en vigor desde mediados de marzo, para frenar la propagación de la pandemia.
La espectacularidad de los traslados de pacientes con coronavirus marca desde hace dos semanas la vida de las regiones fronterizas alemanas, en las que las faltas de respeto con los pacientes extranjeros, en todo caso, suponen hechos aislados. Dado el alto peligro de contagio, helicópteros militares franceses Caïman y aviones del Ejército alemán son los encargados de hacer llegar a pacientes como F. G. desde la ciudad de Metz, uno de los principales focos de la epidemia en el país.
Fue uno de los primeros franceses llegados a Alemania, el pasado 28 de marzo, y está esperando ya el alta para ser devuelto a su país. «Estoy tremendamente agradecido, yo y toda mi familia, este es uno de esos gestos que nunca se olvidan», ha declarado a la prensa francesa. La ministra de Defensa gala, Florence Parly, también ha declarado que «agradezco profundamente a nuestros amigos alemanes su apoyo y su solidaridad… Somos dos países amigos con un único objetivo: vencer al COVID-19».
En los programas de acogida de pacientes extranjeros participa también Baviera, que recibe fundamentalmente pacientes del norte de Italia, sin precisar cifras. Renania Palatinado, Renania del Norte-Westfalia y Sajonia, junto a el Sarre y Baden Württemberg, han mostrado también su disposición a atender casos, siempre en grupos reducidos y en situación de emergencia, que precisan ser ingresados urgentemente en unidades equipadas con aparatos de respiración artificial y debidamente aisladas. A tal efecto se han puesto en contacto con las autoridades sanitarias de las regiones francesas fronterizas.
La decisión sobre esos casos, así como la gestión de los traslados, es competencia directa de los estados federados y cuenta con «todo el apoyo del gobierno federal», ha dicho el ministro Maas. En una encuesta entre los ministerios de salud de los 16 estados federados, realizada por Welt am Sonntag y publicada este pasado fin de semana, todos aseguran que han admitido a pacientes de Covid-19 o al menos han ofrecido camas de cuidados intensivos y, en algunos casos, han proporcionado equipos médicos o experiencia médica. Renania del Norte-Westfalia, Baden-Württemberg y el Sarre son a fecha de hoy los que atienden a la mayoría de los pacientes de Covid-19 de otros países de la UE.
Según el gobierno del estado de Stuttgart, 28 pacientes de Francia y dos de Italia están siendo tratados en sus hospitales. Hay 23 pacientes franceses en el Sarre. Según el gobierno del estado de Renania del Norte-Westfalia, diez pacientes de Italia, ocho de Francia y 39 pacientes de los Países Bajos han sido tratados clínicamente.
Si bien la demanda por parte de Italia de camas de cuidados intensivos disponibles en Alemania tiende a disminuir, el número de consultas de Holanda recientemente ha aumentado de manera significativa. El gobierno estatal de Baja Sajonia está «en estrecho contacto con el gobierno de los Países Bajos para poder proporcionar asistencia administrativa en algunos casos difíciles si el sistema de salud local se encuentra en una situación de sobrecarga temporal», informa un portavoz.
Al comienzo de la semana pasada, el gobierno federal había anunciado que 24 pacientes holandeses serían atendidos en el territorio alemán. Según los comentarios de los estados federales, el número ha aumentado a 40 pacientes en solo una semana.
Incluso los estados federados en los que el partido antieuropeo y anti extranjeros Alternativa para Alemania (AfD) tiene mayor peso político, están recibiendo pacientes de otros países europeos, aunque en menos número. El pasado miércoles, un helicóptero con dos infectados en estado crítico y procedentes de Francia aterrizó en el norte de Turingia. Están siendo atendidos en la clínica de especialidad pulmonar en Neustadt, en la región sur de Harz, donde se esperan además dos pacientes más de Francia.
El médico jefe y director de la clínica pulmonar, Dr. Bernd Kurz, confirma que permanecen ventilados con respiradores pero que han sido estabilizados y se espera su recuperación. «La fase aguda ha terminado, en realidad alejaremos a los pacientes de la ventilación con bastante rapidez», ha dicho, además de constatar que cuatro ayudantes del Hospital Universitario Jena volaron a Italia el miércoles para prestar allí ayuda.