Oscar Currilén se llama el Intendente de El Maitén en la zona cordillerana de Chubut, donde la autodenominada Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) atacan los puestos en las estancias, poniendo en riesgo fuentes de trabajo y vidas de los pobladores de ese pequeño poblado cordillerano.
El Intendente de El Maitén solicitó ayuda al gobierno provincial para que tome en sus manos la defensa inmediata de la población de esa localidad, reprochándole a Mario Das Neves haber dejado pasar mucho tiempo y permitir el crecimiento de esta banda que asola el oeste de Chubut, utilizando una supuesta reivindicación del pueblo Mapuche, cuando en realidad la misma comunidad aborigen está en desacuerdo con los medios violentos que utiliza esta banda rural.
El Intendente Oscar Currilén, de descendencia aborigen, ha salido por cuanto medio de Chubut ha podido, denunciando que alrededor de 7 u 8 puestos en campos donde trabajaban peones de campos, fueron quemados totalmente con las pertenencias de los trabajadores adentro, a quienes ataron y amenazaron con quemar vivos.
Alrededor de El Maitén se encuentran los campos de Benetton, unidades productivas de las cuales dependen muchos pobladores de los escasos 6.500 habitantes que tiene el pueblo. El Intendente Currilén aseguró que el miedo de las autoridades es que ante los ataques indiscriminados y ante la indefensión de los puesteros, Bennetton decida bajar la producción o suspenderla, lo cual ocasionaría una desocupación masiva en el pequeño pueblo, por cuanto de esas explotaciones dependen unos 500 trabajadores.
Por este motivo hace unos días se conformó una asamblea autoconvocadas de vecinos de El Maitén pidiéndole al gobierno provincial seguridad en campos y las rutas, para que actúe contra las bandas que acechan con caras tapadas, palos, cuchillos y armas de fuego, a quienes viven en los campos, sembrando el terror entre los peones, muchos de los cuales se han ido de allí con su familia.Han perpetrado todo tipo de ataques como la destrucción de la estación de la Trochita en Esquel y el robo indiscriminado.
Antes de ayer se realizó una numerosa marcha de descendientes mapuches en Esquel en contra de la agrupación RAM y los “Lonkos” fueron a ver al intendente de El Maitén para dejar bien sentado que ellos no apoyan ni abonan las prácticas delincuenciales de los RAM. Expresaron que si bien la recuperación de las tierras es un objetivo ancestral, nunca admitieron que se debía hacer por las armas, con uso de la violencia y en contra del mismo pueblo Mapuche. Calificaron a los autores de los ataques como “delincuentes comunes” y los señalaron como responsables de perseguir objetivos personales inconfesables, usando como argumento la reivindicación del pueblo Mapuche.
En las localidades de la cordillera, ya se hace un grito el pedido de ayuda y advierten al gobierno provincial que ha dejado pasar mucho tiempo y no ha reaccionado a tiempo, ante los desmanes de estos grupos violentos, armados y conducidos por Jones Huala, un hombre que alienta la rebelión armada y que por estas horas recibe el repudio de la población y se escuchan pedidos concretos para que la justicia de Chubut acceda a otorgar la extradición que pide Chile para juzgarlo en ese país por un crimen y el incendio de una propiedad.