En la 99.9 el economista Iván Carrino analizó los cambios en las metas inflacionarias que anunció el gobierno nacional y señaló que “es una muy mala noticia”. Además, advirtió que “ahora Sturzenegger no tiene credibilidad porque si a Marcos Peña no le gusta la meta, la vuelve a subir”.
Las medidas anunciadas por el gobierno a través de sus principales actores económicos respecto de las metas de inflación han traído a la superficie el debate sobre el rol del Banco Central a partir de la determinación tomada.
El economista Iván Carrino hizo su propio análisis de la situación en la 99.9 y destacó que “lo que se anunció es una muy mala noticia. Es la claudicación del Banco Central en sus objetivos y una imposición del ala política sobre el ala técnica para relajar las metas de inflación, buscar un relajamiento de la política monetaria. Triunfó la política, pero sobre todo el ala desarrollista e industrialista de los que hacen economía dentro del gobierno. No es el fin del mundo, pero es ir hacia más inflación dejandonos llevar por ideas que nunca llevaron prosperidad al país”.
La libertad absoluta para el Banco Central no es algo lógico en el contexto del gobierno actual, pero ahora el futuro es muy complicado: “en un gobierno de Cambiemos no tendría sentido que el Banco Central hiciera lo que quisiera y sea independiente. Una vez en el poder, la política monetaria, las herramientas y los objetivos debería fijarlos el Banco Central en un gobierno que quiere bajar la inflación. Ahora Sturzenegger no tiene credibilidad porque si a Marcos Peña no le gusta la meta, la vuelve a subir”, advirtió.
Por último, analizó las consecuencias del ascenso del precio del dólar en los últimos días que es otro de los temas económicos centrales: “cuando sube el dólar se piensa que todo va a explotar. Hasta antes de ayer el dólar venía subiendo y no me generaba una preocupación desde lo profesional, pero lo que pasó ayer tiene una relación directa con el anuncio que se realizó. Hay una filosofía económica que tiene Prat Gay junto con otros para bajar la tasa buscando que suba el dólar y si la inflación cae despacio, mejor porque eso es bueno para la actividad económica. Son ideas que fracasaron en el pasado y estaba combatiendo Sturzenegger”, finalizó.