El director de cine James Cameron ha donado al Instituto Nacional de Inmersión Profunda Woods Hole (WHOI) el submarino con el que descendió a la Fosa de las Marianas, el punto más profundo del planeta conocido hasta ahora.
Cameron quiere mostrar su apoyo a la exploración de los océanos, por eso decidió donar la nave para que se siga utilizando en la investigación del océano. Según su portavoz, los siete años que se invirtieron en el diseño y la construcción del submarino “Deepsea Challenger” se podrán extender ahora en investigación en alta mar.
El submarino tiene la posibilidad de resistir las presiones de las corrientes marina, cuenta con sistemas especiales de flotación, un diseño especial de batería y almacenamiento de energía y formas innovadoras de capturas imágenes y muestras del fondo marino.
El ingeniero responsable de su construcción, Andy Bowen, señaló que los científicos de la institución empezarán a utilizar algunos componentes del “Deepsea Challenger” casi de inmediato. Además, el geoquímico Chris German pretende utilizar la cámara de la bomba sumergible durante las inmersiones con un vehículo a control remoto en la fosa de las Caimán.
El 26 de marzo de 2012, Cameron descendió a la Fosa de las Marianas a bordo del mini submarino “Deepsea Challenger”, de unos 7 metros de altura y con capacidad para una sola persona, diseñado para descender en posición vertical. La Fosa de las Marianas se encuentra en el punto más profundo del planeta, ubicado en el Océano Pacífico, al suroeste de Guam. En 1960, el teniente de la Marina estadounidense Don Walsh y el oceanógrafo suizo Jacques Piccard fueron los primeros en llegar allí, donde pasaron unos 20 minutos a bordo de un rudimentario batiscafo artesanal.
En esta ocasión, Cameron permaneció sumergido más de dos horas y media. Allí pudo recoger muestras para la investigación de biología marina, geología y geofísica; también tomó fotografías fijas y secuencias de vídeo.