La presidenta del Colegio de Ópticos de la provincia de Buenos Aires habló sobre el programa “Miremos Bien”; destinado a la concientización sobre el daño que pueden generar los anteojos y lentes para sol que se venden por fuera de las ópticas.
Desde el Colegio de Ópticos de la provincia de Buenos Aires han lanzado una campaña denominada “Miremos Bien” y destinado a concientizar a la población ante el daño que provoca comprar anteojos y lentes para sol en comercios no habilitados.
La presidenta del organismo, Judith Pizzatti brindó los detalles a través de la 99.9 explicando que “es un programa que desarrolla el Colegio de Ópticos para que miremos bien donde vamos a adquirir los anteojos, lentes de contacto o anteojos para el sol. Vemos que crece exponencialmente la oferta ilegal en la calle con los denominados manteros, en los locales como kioscos y también la venta por internet. Todos estos lugares no tienen el control de un profesional óptico que es el que garantiza que los cristales con graduación o para el sol, sean de calidad y no tengan aberraciones”.
El problema es que los elementos que se adquieren, generan daños a la persona por no ser material idóneo: “todo esto que se vende por fuera de las ópticas, en algunos casos son como lupas que aumentan el tamaño de la imagen. Vemos como la gente se está como automedicando, son elementos para utilizar puntualmente ante una situación, no para utilizar siempre con los problemas de visión próxima”.
También hay una afectación directa con los rayos solares que terminan haciendo un daño en la persona que usa este tipo de elementos: “no son anteojos y no se puede comparar con un anteojo que se adquiere en una óptica. Parecen anteojos pero no lo son, son plásticos pintados que hacen que no pase tanta luz y genera que el globo ocular trate de acomodarse a la situación, la pupila se dilata para que pase la luz porque no puede ver y entran los rayos nocivos, los UV y los infrarrojos”.
Por otro lado, Pizzatti hizo referencia a la convocatoria que realizaron a todos los Municipios de la Provincia de Buenos Aires a firmar un Convenio Marco de Asistencia Profesional, por el cual las ópticas adheridas ofrecerán un anteojo a un precio social: “buscamos un marco de asistencia profesional. Los ópticos nos comprometemos ante los municipios a entregar un anteojo a un valor social, al 50%. Hay lugares como Sociedades de Fomento, casas particulares o clubes donde se está ofreciendo asistencia oftalmológica, óptica y hasta de ortopedia. Así el negocio es de unos particulares y es que todos salgan con un anteojo. El valor de ese anteojo es 100% más caro que un anteojo social que ya estamos ofreciendo en las ópticas porque hay municipios que se adhirieron el año pasado”.
El procedimiento que pretenden realizar, tiene una pata fundamental en el municipio para saber cuáles son las personas que necesitan un precio más barato porque no pueden pagarlo: “el municipio detecta a las personas que no tienen recursos económicos y allí, la persona entre las ópticas que se adhieren al programa, puede ir a ser atendido por un profesional óptico y habilitado por el Ministerio de Salud de la Provincia”.