Los inversores argumentan que la automotriz alemana debió haber informado a tiempo sobre el escándalo de emisiones de vehículos diésel. Las acciones de VW perdieron hasta 37% de su valor en los días posteriores a que el hecho se hiciera público.
Volkswagen enfrentaba este lunes un juicio en el que inversores piden 9.200 millones de euros (10.600 millones de dólares) en compensaciones, bajo el argumento de que la automotriz alemana debió haber informado a tiempo a sus accionistas sobre el escándalo de emisiones de vehículos diésel.
Accionistas representados en 1.670 demandas buscan una compensación por la caída en el precio de las acciones de Volkswagen (VW) generada por el escándalo, que estalló en septiembre del 2015 y que hasta el momento ha costado a la empresa multas y penalizaciones por 27.400 millones de euros.
“VW debería haber avisado al mercado que cometió manipulación y creó riesgos valuados en miles de millones de dólares”, dijo Andreas Tilp, abogado de los demandas, en la corte regional de la ciudad alemana de Brunswick.
“Creemos que VW debería haberle dicho al mercado no más tarde que en junio del 2008 que no podía desarrollar la tecnología que necesitaba en Estados Unidos”, sostuvo.
Los demandantes dijeron que VW no cumplió con su deber de informar a los inversores sobre el impacto financiero del escándalo, que llegó a la opinión pública sólo después de que la Agencia de Protección Medioambiental de Estados Unidos (EPA) emitió un “aviso de transgresión” el 18 de septiembre de 2015.
Si los inversores hubieran estado informados de las actividades criminales de Volkswagen, entonces habrían vendido sus acciones o no habrían realizado compras, y por lo tanto se habrían evitado pérdidas a los accionistas, argumentaron los demandantes.
Las acciones de VW perdieron hasta 37% de su valor en los días posteriores a que las autoridades expusieron las prácticas de VW sobre sus autos diésel, que emitían niveles de polución ilegales.
VW ha admitido haber cometido manipulación sistemática sobre las emisiones de gases de sus vehículos, pero niega delitos vinculados a la notificación tardía de las malas prácticas.