La diputada nacional habló en la 99.9 sobre la reunión sin presencia de medios y fuera de agenda que tuvo el Canciller Santiago Cafiero con la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados y donde se dio una discusión particular entre ambos.
De manera casi secreta, se llevó adelante una reunión de legisladores con el Canciller Santiago Cafiero, donde se brindó un informe de gestión en la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados.
Entre las presentes estuvo la Diputada Karina Banfi que protagonizó un momento tenso con el funcionario respecto de la posición que el gobierno adopta con violaciones de derechos humanos en distintos países. En la 99.9 comentó inicialmente que fue una sorpresa que la reunión no fuera abierta: “me enteré cuando llegué a la reunión que era de carácter reservado y no había sido parte de la agenda. Nunca supe que la reunión no estaba en la orden del día, es una reunión de alto nivel cuando viene el Canciller de la Nación al Congreso a rendir cuentas. Fueron 3 horas donde tuvimos la posibilidad de preguntar sobre diferentes temas que son parte de la agenda parlamentaria”.
Respecto del cruce que tuvo con el Canciller, contó que “fue un momento muy tenso”. Luego abundó: “había unas 20 personas presentes y me resultó desagradable. El Canciller venía respondiendo de forma amigable las preguntas que se le hacían y en un momento declara que reconoce la existencia de violaciones de derechos humanos en Venezuela. Dijo que la posición la manifiestan y trabajan en los organismos competentes. Esbozó de alguna forma que no quería que fuera politizado el tema de violaciones de derechos humanos“.
Por supuesto que llamó la atención de Banfi inmediatamente porque públicamente se expresan de una forma muy distinta: “indicó que esto lo hacen porque determinados medios de comunicación, según la posición oficial del gobierno, tergiversa el tema cuando debe tener un carácter objetivo. La verdad que es todo medio tirado de los pelos. Ahí le dije que tenían que tener una posición clara, no podes contestar una cosa por un lado y después hacer un convenio de cooperación con el embajador de Cuba cuando nunca se manifestó respecto de los 600 detenidos, procesados y encarcelados por haber protestado el año pasado en las calles cubanas. Mucha gente terminó con 20 años de cárcel por una protesta social”.
No pudo quedarse en silencio ante una declaración de este tipo y lo enfrentó. Ahí fue donde el tono de la exposición, cambió: “le planteo algunas contradicciones como que Argentina cambió la posición de abstenerse en los rechazos y repudios en contra de la dictadura de Ortega en Nicaragua pero a partir de noviembre del 2021 esa línea cambia. Raimundi, embajador ante la OEA, se niega a participar de una reunión del Consejo Permanente y las grabaciones delatan que eso fue así. No participó de un rechazo a terminar con la persecución a periodistas a Nicaragua”.
No tuvo una respuesta acorde a la investidura, sino por el contrario atacandola, en vez de dar explicaciones: “la respuesta fue agresiva. No quiso contestar, me dijo que estaba equivocada y no era así. Sólo había que buscarlo en internet y nada mas. Luego de esa reunión, lo que me queda es seguir pensando en donde está el gobierno nacional en materia de Derechos Humanos especialmente en el triángulo Argentina-Venezuela-Irán del cuál tenemos que salir porque nos contradice constantemente”.