Un reporte de Legal Aid remarca que el año pasado se concretaron las erogaciones más altas en cinco años, significando un desembolso de $121 millones para las arcas municipales. NYPD aclara que siete de los casos indemnizados, ocurrieron entre 1965 y 2010.
La última vez que el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) estuvo con todos los reflectores puestos en supuestas acciones de brutalidad policial, fue por sus actuaciones durante el “huracán” de las protestas por el asesinato del afroamericano George Floyd. Era el año 2020.
Ahora, en medio de leves “vientos” que llegan a la Gran Manzana, por el violento arresto que provocó la muerte de Tyre Nichols, en Memphis, surgen nuevos datos que revelan que a pesar de varias reformas, la Ciudad sigue pagando un alto precio económico por oficiales “mala conducta”.
Al menos, ese es el criterio de la Sociedad de Ayuda Legal de Nueva York (Legal Aid), que esta semana publicó un análisis de datos que revela que la Alcaldía pagó más de $121 millones en demandas por “mala conducta policial” en 2022, el pago más alto en al menos cinco años. Y casi $34 millones más que en 2021.
En un informe se remarca que es probable que los desembolsos por indemnizaciones y querellas, “sean sustancialmente más altos”, porque en este reporte no se incluyen asuntos que se resolvieron directamente en la oficina del Contralor de la Ciudad de Nueva York, antes del litigio formal.
El año pasado, la Junta de Revisión de Quejas Civiles (CCRB), el organismo de supervisión que examina la mala conducta de la policía, recomendó que 145 policías de la ciudad deberían ser disciplinados por conducta violenta, durante las manifestaciones después del asesinato de George Floyd, un hombre negro de 46 años que murió en Minneapolis después que un oficial de policía blanco, le inmovilizara el cuello contra el suelo en 2020.
Durante las semanas de protesta, policías y manifestantes se enfrentaron por toda la ciudad, lo que provocó heridos y cientos de arrestos.
CCRB encontró evidencias para respaldar a 267 acusaciones de mala conducta contra los oficiales y recomendó para el 60% de ellos “el más alto nivel de disciplina”.
Como especifican los expertos legales, para el NYPD un acuerdo de pago de indemnización económica, no significa automáticamente que el oficial deba ser acusado de cargos disciplinarios.
En la mayoría de los casos, los efectivos no están obligados a cubrir ningún pago civil. Y los “castigos” no han pasado de observaciones en sus expedientes, suspensiones de tres días sin derecho a salario o pérdidas de días de vacaciones.
NYPD reacciona: !No es verdad!
En un comunicado NYPD reaccionó al informe presentado por Legal Aid describiéndolo como erróneo.
Casi el 60% del total de $121 millones pagados en 2022 son atribuibles a siete casos de condena injusta que se resolvieron por $68 millones. Esos siete casos se remontan a eventos que ocurrieron entre 1965 y 2010.
“De las demandas que se presentaron y se resolvieron en 2022, los pagos totales ascienden a $16,8 millones, de los cuales $13 millones son atribuibles a un caso de condena injusta de 1965″, aclara el portavoz policial.
Los 3,8 millones restantes representan menos del 1.4% de los pagos identificados en este informe, que suman $262 millones. Además más del 96% de esa cantidad es atribuible a acciones policiales que ocurrieron bajo administraciones anteriores.
Un caso de alto perfil
En el reporte difundido por la organización defensora de los derechos civiles se destaca que uno de los casos más notables y de alto perfil del año pasado fue un acuerdo de $135,000 que involucró a los oficiales Adonis Long y Shimul Saha.
Las imágenes de la cámara colocadas en el cuerpo aseguradas y publicadas por Legal Aid mostraban a los oficiales golpeando y rociando con pimienta a un hombre sin hogar en la cara y arrastrándolo desde un vagón del metro.
El agredido fue un peluquero, que había salido de un refugio para personas sin hogar en Manhattan, con sus pertenencias en algunas bolsas de mano.
De acuerdo con la demanda, los oficiales hicieron afirmaciones falsas para acusar al hombre de agresión grave.Tanto Long, como Saha, siguen activos en el cuerpo policial.
Hay una denuncia judicial pendiente contra Long, por el incidente descrito en esta demanda, pero el ex comisionado de policía Dermot Shea dijo que NYPD no impondría medidas disciplinarias. Con base a lo informado por Legal Aid, este oficial tenía cinco denuncias civiles previas en su contra, un total de nueve alegaciones, incluida una denuncia de fuerza excesiva emitida ocho meses antes.
También la Junta de Revisión de Quejas Civiles (CCRB) confirmó la acusación y recomendó medidas disciplinarias. A la fecha no se ha impuesto ninguna sanción.
“La mala conducta desenfrenada de la policía de Nueva York continúa costando a los neoyorquinos decenas de millones de dólares cada año. Observamos una arraigada resistencia de la comisionada Keechant Sewell a la rendición de cuentas. Muchos de los oficiales involucrados en estas demandas, probablemente recibieron un simple tirón de orejas”, cuestionó Maggie Hadley, de la Unidad de Litigios Especiales de la Práctica de Defensa Criminal en Legal Aid.
Hay menos castigos
Con base a información compartida a principios de 2023 por la oficina del contralor a medios locales, la ciudad de Nueva York ha repartido más de $1,100 millones para casos de “mala conducta” de la policía neoyorquina desde 2015. Más que cualquier otra agencia de la Ciudad.
Aunque eso no implica que han subido los castigos disciplinarios.
En este sentido, Andrew Case abogado de Latino Justice PRLDEF, asegura que durante la administración del alcalde Bill de Blasio, se aprobó una matriz disciplinaria que establecía los castigos apropiados para la mala conducta policial, incluida la brutalidad.
“Observamos que la comisionada Sewell, ha reducido el castigo para los oficiales declarados culpables de mala conducta. El mes pasado dijo que los castigos son demasiado severos. Sancionar a los policías que acosan y agreden a los neoyorquinos es clave para reducir la brutalidad. Y esta administración ha estado echando para atrás en la lucha para responsabilizar a los policías”, opinó Case.
En esta encrucijada, Latino Justice muestra preocupación acerca del futuro, ya que recientemente se anunciaron inversiones millonarias para equipar con más tecnología de punta a los oficiales.
“NYPD tiene un historial de uso de tecnología para espiar a las personas y mantener bases de datos de aquellos a los que quiere atacar y acosar. Actualmente, mantiene un listado de ‘pandillas’ en la que más del 99% de las personas son negras o latinas. A pesar de que las bandas nacionalistas blancas, están aumentando en la Gran Manzana”, refirió.
La conclusión del activista es que para reducir la violencia policial, es imperativo poner límites a la intrusión de efectivos policiales en la vida de la gente.
La Ciudad: “Buscamos el equiibrio”
En cuanto al cúmulo de quejas por actuaciones calificadas como desproporcionadas durante las protestas por la muerte de George Floyd, la Uniformada ha informado que se han adoptado más de 24 recomendaciones de informes sobre vigilancia de protestas, incluido el desarrollo de políticas en torno a tácticas ante arrestos masivos, saqueos y concentraciones que se salen de control.
Por su parte, el alcalde Eric Adams ha respondido a críticas similares en una dirección: “Buscamos el equilibrio entre la seguridad pública y las demandas de justicia por crueldad policial. No permitiremos que los oficiales que violan la ley o se comportan de manera abusiva, permanezcan en la fuerza”.
“Hay más facilidades para poner quejas”
Un oficial de NYPD retirado, quien prefirió reservar su identidad, asegura a El Diario que “como nunca antes”, hay un constante adiestramiento en la institución, para evitar los excesos y especialmente las provocaciones de algunos elementos violentos, que son “especialistas en la caza de demandas” para obtener dinero.
“Obviamente hay una historia de racismo y de salvajismo, que no podemos ocultar. Pero hoy lejos de situaciones muy particulares, la filosofía de la jerarquía policial es el respeto de los derechos humanos, sobre todas las cosas. El mundo cambió y la policía también”, destacó quien estuvo los últimos 25 años en la institución.
El exoficial que patrulló por años en El Bronx, lamenta que a su juicio siga el discurso “antipolicial” de algunos grupos, mientras que “nunca antes” los vecindarios más pobres han demandando más patrullas, más agentes, más fuerza, que combata a los criminales.
“Hoy dos años después de ese movimiento de ‘Black Lives Matter’, si te vas a las encuestas, los neoyorquinos quieren que se le dé más poder a la policía. Ya probaron qué significa lo contrario. En cuanto a los altos pagos en demandas. Hay formas de interpretarlo. Ahora hay más facilidades para que la gente ponga quejas”, concluyó.
El costo de las demandas civiles:
- $121 millones pagó la Ciudad de Nueva York en indemnizaciones por demandas de brutalidad policial en el 2022 en 939 casos.
- $87 millones fue la cantidad erogada en 2021 en 753 casos, esto significa $34 millones más que el año pasado.
- $1,100 millones por demandas de “mala conducta” policial de Nueva York desde 2015 hasta el 2022.