Según un grupo de investigadores estadounidenses, la cocaína solo necesita unas horas para cambiar la estructura del cerebro.
El equipo de investigadores, compuesto por especialistas de la universidades de Berkeley y San Francisco, realizó pruebas en ratones para observar cómo la cocaína es capaz de afectar el cerebro en apenas unas horas. Poco después de haberles suministrado la droga, los roedores mostraron estructuras nuevas relacionadas con el aprendizaje y la memoria.
La investigadora Linda Wilbrecht, profesora de Psicología y Neurociencia en UC Berkeley, aseguró que sus imágenes “ofrecen una evidencia clara de que la cocaína induce ganancias rápidas en espinas nuevas, y cuanto más espinas ganan los ratones, más demuestran que han aprendido sobre la droga. Esto nos da un posible mecanismo de cómo el consumo de droga alimenta comportamientos de más búsqueda de droga. Estos cambios inducidos en el cerebro pueden explicar cómo señales relacionadas con la droga vienen a dominar las decisiones en un drogadicto humano“.
Por su parte, el Dr. Gerome Breen, del Instituto de Psiquiatría del King’s College de Londres, le explicó a la BBC que “el desarrollo de espina dendrítica es particularmente importante en el aprendizaje y la memoria. Este estudio nos da un entendimiento sólido de cómo ocurre la adicción, muestra cómo el cerebro aprende sobre la adicción“.