Julio Bárbaro, dirigente justicialista, dialogó con la 99.9 esta mañana y analizó las consecuencias del estado de salud de la Presidente. También se refirió al hecho de que Boudou haya quedado a cargo del Poder Ejecutivo. ” La cordura y la madurez están en manos de la oposición“, aseguró.
Cuando el Gobierno planteaba que el tema de la salud de Cristina parecía ser un tema menor, Bárbaro dijo “el golpe de Cristina fue contra las PASO”. Hoy hay que hacer otro tipo análisis, desde la coyuntura política de una Argentina que hoy preside Amado Boudou. “Llama la atención la enfermedad de la Presidenta en el sentido de que, cuando queda Boudou, marca claramente cuál es la identidad del kirschnerismo. Lo que más lastima de Boudou, además del comportamiento antiético, es la mediocridad. Este autoritarismo, que parecía un sistema, en rigor es una sola persona, que es la Presidenta. Atrás no hay nada, solamente un decorado de carta abierta en Pág/12 de pseudosizquierdas. Y una revista que no solo es conservadora sino también mediocre”, opinó.
También señaló: “la idea es que lo que no es oficialismo, es traición, es corporación, es el mal. El cachivache de la Ley de Medios para ver si el stalinismo imponía una sola palabra y una sola voz en una sociedad donde se quiso llevar preso al que medía la inflación real y no con el número de Moreno, si uno no tiene claro la gravedad de lo que hemos vivido, es muy peligroso”. Y agregó: “el kirschnerismo quiso ir por todo, marcar su eternidad y ser la base para una nueva política, y hace rato ya mostró su desnudez”.
Bárbaro, además, fue crítico al decir que “ayer, cuando los veía defender a Boudou, dije ‘ya no hay límites’. Los muchachos están acostumbrados a todo. Hablan de los caceroleros, nosotros no somos caceroleros. Hablan de una situación desastrosa y todavía quieren que asumamos nosotros las cosas que rompieron ellos. Está claro que si el K no rescató a muchos pobres, lo que sí hizo fue construir un montón de ricos”. Luego, aseguró: “yo creo que la cordura y la madurez están en manos de la oposición”.